22/11/2024

Uno a uno del Madrid: Rudy gobierna y el Chacho decide

Viernes 19 de Junio del 2015

Uno a uno del Madrid: Rudy gobierna y el Chacho decide

El equipo blanco venció en el primer encuentro de la final de la Liga Endesa (78-72) gracias a la imprescindible aportación de estos dos jugadores.

El equipo blanco venció en el primer encuentro de la final de la Liga Endesa (78-72) gracias a la imprescindible aportación de estos dos jugadores.

Sergio Llull (13 de valoración): Anotó el primer triple del partido y pese a fallar los tiros siguientes, cumplió en defensa y en la dirección del juego. Tras jugar casi todo el primer cuarto, resultó extraño que Laso no le volviera a dar entrada hasta el último minuto del segundo. No fue su mejor actuación, pero incluso así es capaz de sumar en casi todas las facetas. Fundamental.

K.C. Rivers (2): Sin peso en el ataque, pero importante en defensa ante los exteriores azulgranas. Es capaz de fallar un triple y recuperar el balón sin que este cruce el medio campo. Así llegó una de sus cuatro recuperaciones. Una pesadilla para DeShaun Thomas.

Rudy Fernández (21): El balear completó un completo y gran primer cuarto. Protagonizó un bonito duelo con Mario Hezonja. Supo seleccionar bien sus tiros y no acaparó tanto el balón a como acostumbra en ocasiones. Un triplazo a medio minuto del intermedio le permitió marcharse al vestuario como el mejor del partido al descanso (15 de valoración). En la segunda mitad no fue tan protagonista, pero palmeó un balón en ataque y forzó dos tiros libres vitales cuando el Barça se situó a dos puntos (72-70). Sobresaliente-

Felipe Reyes (15): El MVP de la Liga es fundamental en el engranaje de los blancos. Sus compañeros lo saben y le surtieron con muchos balones al poste. Puede que no tenga el mejor movimiento de pies o sea el jugador más plástico, pero cuando recibe con ventaja, es casi imparable. Arrancó emparejándose en defensa con Tomic y Pleiss mientras que Ayón lo hacía con Lampe. Cada vez que recibe con ventaja en el poste saca petróleo.

Gustavo Ayón (13): El mexicano comenzó siendo un dolor de muelas para la defensa visitante hasta que un enganchón con Pleiss desembocó en una técnica para ambos jugadores. Con buen criterio, Laso optó por mandarle al banquillo mientras era ovacionado por la grada. En el segundo cuarto se le vio con algún tipo de molestia en el pie izquierdo que no le impidió completar un notable encuentro.

Andrés Nocioni (9): Al ‘Chapu’ le gustan jugar este tipo de partidos (“vine para esto”, suele repetir una y otra vez) y eso se nota. Contar con un jugador de su nivel, carácter y experiencia que salga del banquillo y haga tantas cosas es un seguro de vida. Alternó minutos con Felipe Reyes (solo coincidieron cuando quedaban segundos en el marcador) y, sin brillar en exceso, dejó detalles de todo lo que aporta: triples, penetraciones remontando la línea de fondo, un inmenso tapón a Tomic, rebañar balones antes de que caigan por el aro…

Sergio Rodríguez (17): Su entrada en cancha significó el despegue del Madrid en los instantes finales del primer periodo. Pese a ello, su mayor dosis de protagonismo llegó en el último cuarto. Arriesgó en exceso y que acabó perdiendo algún balón de más, pero acabó repartiendo 8 asistencias. Para bien de su equipo, fue protagonista en el último minuto.

Jaycee Carroll (8): Entró en ebullición en un tramo del segundo cuarto, aunque su gran mérito fue su buen trabajo defensivo y de desgaste sobre Huertas.

Marcus Slaughter (-1): Mucho más protagonista en su propio aro que en el contrario. No se ve seguro en ataque: completamente solo debajo de canasta, optó por abrir el balón para el triple de Rudy que, al menos, sí entró.

Jonas Maciulis (-1): No fue su tarde: estuvo fallón en el tiro. Aun así clavó un triple que abrió el camino para que los blancos pusieran tierra de por medio con menos de siete minutos para la conclusión de este primer duelo. El público supo reconocer su entrega.

Salah Mejri (2): Salió con ganas, pero esta hiperactividad de nuevo le jugó una mala pasada y acabó marchándose al banco desquiciado y discutiendo con un árbitro.

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