TNA no está atravesando una buena situación financiera. A pesar de haberse desligado de los contratos más pesados durante los últimos años, sus problemas económicos, que se acentuaron en las etapas finales en Spike TV, no pudieron revertirse en ningún momento.
TNA se está manteniendo por su cuenta con poca ayuda exterior. Para colmo, con la bajada de los ratings en POP TV, el interés en pagar propaganda en sus horarios televisivos ha decaído y el dinero ganado a partir de ello ha sido muy escaso.
Panda Energy, compañía del padre de Dixie Carter y propietaria de TNA, ha dejado de proveer de grandes sumas de dinero ya que la familia Carter no ve con buenos ojos las pérdidas que ha sufrido TNA y han alentado a Dixie a vender la compañía. La presidente se ha mostrado en contra de hacerlo, pero vistos los problemas económicos aceptó la intervención de nuevos inversores.
Lo primero que buscaron fue intentar convencer a Billy Corgan y el rapero Wale para que se hicieran con un porcentaje de la compañía, pero ambos rechazaron por falta de interés. Ante la negativa de los músicos, se siguió buscando suerte… y parece que dieron en el ángulo.
El inversor interesado ofrece a comprar la mayoría del porcentaje, en busca de convertirse en la máxima autoridad. Para ser concretos, la oferta que ha puesto sobre la mesa ha sido hacerse con el 55%, dejando a los Carter con un 45% y minoría de poder.
Dixie, al no querer perder el control mayoritorio de TNA, ha querido modificar la propuesta y ofreció vender el 49%. Queda por ver si la intención del posible inversor se limita a obtener la parte mayoritaria, lo que traería un problema. Estaremos al tanto al transcurso de los hechos.