Ya puedes añadir otro nombre más a la lista de ideas locas que alguna vez has tenido para un coche y que luego una marca ha hecho realidad: un coche tren. Eso es exactamente lo que es el Smart forrail, un forfour transformado para rodar sobre raíles.
Se trata de un proyecto particular, no cabe duda, del que solo se producirá una única unidad que además, es plenamente funcional y está homologada para circular por la red ferroviaria. El desarrollo ha sido bastante complejo, ha durado seis meses y para llevarlo a cabo la gente de Smart ha contado con la ayuda de Interfleet.
La principal modificación que recibe el compacto es la sustitución de las ruedas tradicionales por unas de acero macizo, con unas dimensiones de 22 pulgadas y un peso de 80 kg cada, algo necesario para que mejore la tracción sobre los raíles.
Sin embargo, y dado que se trata de una conducción guiada, también se ha eliminado el sistema de dirección (lógico) y se ha reforzado el eje delantero con piezas de aluminio soldado para evitar movimientos indeseados de las ruedas.
El forraril ya se ha probado en circunstancias reales, llevando a cabo seis viajes de ida y vuelta en un trayecto de 16 kilómetros en la región de Sussex.