En la lucha libre no todo son lances, acrobacias, llaves y contrallaves, risas y felicidad, también existe el riesgo de una lesión, la cual puede ser desde minúscula hasta grave e incluso hay la posibilidad de que un luchador pierda la vida arriba del cuadrilátero, motivo por el cual, los gladiadores tienen una frase: “todos sabemos cómo subimos, pero nadie sabe cómo vamos a bajar”.
En los entrenamientos o en una función, la muerte siempre tiene un lugar reservado entre las primeras filas, observando detenidamente a los estetas y en cualquier momento podría subir al encordado para llevarlos a luchar al “ring celestial”.
El 17 de marzo del 2022, con apenas 24 años de edad, Black Warrior Jr. perdió la vida a causa de un movimiento que realizó durante un entrenamiento, mismo que le fracturó las cervicales, una grave lesión que lo mantuvo siete meses en cama luchando por recuperarse.
A un año de la partida de su Chaparrito, su tía, Sanely, amazona del Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL), reconoció que el fallecimiento de su sobrino ha sido lo más complicado que ha vivido como luchadora y como persona, de hecho, este lamentable acontecimiento le generó temor de volver a subirse a un ring.
“Lo más complicado hasta la fecha ha sido la pérdida de mi sobrino Black Warrior Jr. Nunca en la vida habíamos tenido pérdidas familiares y menos tan cercanas; desgraciadamente murió haciendo lo que más amaba que era la lucha libre y tenemos que honrarlo para que su sacrificio valiera la pena y demostrar que traemos garra”, mencionó en exclusiva para MILENIO-La Afición en su programa “Sin Máscaras”, donde agregó:
“Sí me causó más miedo con lo de mi sobrino, no fue el no bajar de un ring, si no volverme a subir, pero creo que es parte de un proceso de pérdida. Lo superas, lo trabajas y te das cuenta que es lo que decidimos hacer y sabemos la responsabilidad que conlleva. Amamos el deporte, lo damos todo sin pensar en las consecuencias. Nunca piensas en que te va a pasar a ti porque por eso te preparas, por eso entrenas, entonces sí ahí está la mano de Dios”.
Psicóloga de profesión
Por las venas de La Dama del Guante Negro corre sangre de luchador, pues es nieta de Rebelde, hija de la leyenda del pancracio, Mano Negra y hermana de Mano Negra Jr, pero antes de debutar como luchadora, su padre le exigió que le entregara un título universitario para poder estar en los encordados, por lo que se recibió como psicóloga y especializada en psicología infantil.
“Soy licenciada en Psicología, egresada de la UNAM y me especializo en niños.
Toda la vida me ha gustado la psicología, iba para otra área, pero cuando nace mi sobrino me causó mucha curiosidad, en casa yo había sido la pequeñita y justo en el inter cuando tenía que escoger área para la carrera, dije: ‘pues vámonos al infantil, vamos a entender a estos niños porque yo no comprendo. Sí la ejercía, pero después de la pandemia me embaracé, tuve a mi bebé y paré, pero ahorita lo estoy reactivando”.
Gran responsabilidad ser hija de una leyenda
Para concluir, Sanely aseguró que ser la única mujer heredera de Mano Negra conlleva una gran responsabilidad.
“Mucha responsabilidad, porque estás cargando la historia luchística de tu padre, de tu abuelo, no es como que me suba y decir soy hija de… Tengo que demostrar que lo traigo en la sangre, que estoy preparada, que valió la pena todo el trabajo que hicieron mis antecesores y que yo por ser la única mujer tengo que demostrar a veces hasta lo doble. Estoy aquí porque amo la lucha libre y tengo que dar el todo por el todo”, concluyó.
La Cifra
7
Años tiene Sanely como luchadora profesional. Su debut fue el 25 de julio del 2016 en Puebla.
En el 2015, incursionó en el fitness.
Así lo dijo
“No me ha tocado ninguna experiencia desagradable (machismo o acoso), como siempre lo digo: las compañeras de antaño que lucharon y pelearon por esto, abrieron las puertas, y yo soy la que estoy gozando de esa pelea ahora”
Sanely
Luchadora
MGC