A veces, en el puente donde habitan los mendigos hay un rey destronado con los bolsillos llenos de monedas de oro que un día fue brillante y que ahora hay que pulir, poco a poco, hasta recuperar el dorado. En ocasiones donde viven los pobres más pobres hay un muchacho que podría reinar si tuviera lápices de colores en sus manos para poder escribir la historia. Décimo y duodécimo. Así están, así demostraron lo que son al final de una carrera épica, Fernando Alonso con su McLaren Honda en esbozo y Roberto Merhi con un Manor de juguete en esta Fórmula 1. El asturiano logró en Silverstone su primer punto de la temporada, es cierto que favorecido por multitud de abandonos, pero también con un pilotaje tan sólido como suele y con alguna que otra genialidad en lluvia.
A pesar de todo, su coche aún sigue muy muy atrás, casi tres segundos más lento que los de arriba, y deben seguir trabajando para mejorar y lograr la decencia por méritos propios. Ya. No se puede esperar mucho más. El español consiguió sus primeros puntos al octavo test de temporada, esas son las ocho carreras en las que ha participado y dejó atrás una mala racha de cuatro abandonos consecutivos. Quizá sea este el inicio, se comienza con un paso adelante. Después vendrán más. Y si la lluvia favoreció el talento de Alonso, dejó ver la clase de un Merhi que iba último y con la pista mojada comenzó a meterle dos segundos por vuelta a su compañero Stevens, a pesar de su déficit de motor. Al final acabó por delante.
Delante. Palabra amiga ya para siempre de Lewis Hamilton. El británico ganó, otra vez, quinta victoria de la temporada para el hijo de la Gran Bretaña que se subió emocionado a lo más alto del podio junto a su inseparable compañero Nico Rosberg y un sorprendente Sebastian Vettel. Pero para llegar a ese momento antes vimos un Felipe Massa espectacular en la salida, se puso primero el paulista y Bottas tras él con los dos Mercedes por detrás, finalmente le pasó Hamilton, pero a la segunda vuelta tuvo que salir el coche de seguridad.
Un toque entre Grosjean, Button y Alonso dejó al inglés fuera de carrera, al asturiano entrando a cambiar morro y neumáticos y después a un Hamilton desatado intentando pasar a los Williams, pero viendo como era Bottas el que le adelantaba a él. Fue el momento de la carrera antes de la lluvia porque el finlandés era más veloz que el brasileño. “No luchéis entre vosotros”, les llegaron a decir… Eran esos momentos en los que por detrás abandonaba Max Verstappen y Carlos Sainz marchaba décimo tras problemas en la salida.
Llegó el momento de las paradas en boxes, Hamilton lo hizo una vuelta antes y se puso líder, por detrás Bottas que sale al lado de Massa y Rosberg que intenta pasarlos sin pode conseguirlo. Ahí estaba la carrera con el alemán intentando sin conseguirlo y Hamilton volando hacia la victoria cuando las nubes se volvieron negras y comenzó a llover. Poco antes abandonaba Sainz con problemas en su Toro Rosso.
Y apareció Nico para pasar a Bottas, primero y a Massa después y acercarse a Lewis hasta que llovió de verdad, tuvieron que volver a entrar a cambiar neumáticos y ahí se quedó la victoria de Hamilton. Y la desgracia de los Williams, les dejaron con los duros cuando llovía, les cambiaron gomas tarde y Vettel, velocísimo en la lluvia como suele, les dejó sin podio. Por detrás Alonso se comía a Ericsson por los puntos y se ponía décimo y Merhi luchaba con su rival de los mismos colores. Detalles.
En un Silverstone lleno hasta mil banderas, con famosos y famosas, sonrisas y champagne en la campiña inglesa, Hamilton volvió a vencer incluso a los elementos y Alonso dejó un trocito de esperanza. Un punto. Se empieza por el número uno, después…