Cumplió esa necesidad que lo obsesionaba. Nadie lo merecía más que él. Convirtió su desesperación por ganar prestigio en su personaje para calmar su preocupación como padre. Kevin Owens se coronó como el máximo villano de WWE al ganar el Universal Championship de la mano de Triple H, pero Kevin Steen se consolidó como el héroe más grande para su hijo Owen Steen.
En agosto de 2014, Triple H anunció orgulloso que WWE firmó a Kevin Steen para las filas NXT. Debutó en diciembre como Kevin Owens, dos meses más tarde se convirtió en campeón de la marca amarilla. Para mayo de 2015, su jefe lo presentó como aquel que tiene "esa vieja expresión: empieza a ser 'el hombre'".
Kevin Owens llegó a WWE con la intención se convertirse en un recolector de títulos. Fue una carrera de toros con alma de pura sangre. "Este es mi show", gritó cuando por fin reaccionó que se había convertido en el campeón mundial, casi un año después de haber ganado su primer título -el Intercontinental- en el mismo lugar, el Toyota Center de Houston, Texas.
Owen Steen es el hijo de Kevin Owens -de allí viene el nombre artístico-. Es un tierno niño que vive con trastornos del espectro autista. Desde que ve lucha libre -con su padre como la figura más importante de Ring of Honor- tiene a John Cena como su ídolo máximo. Es por eso que el ahora monarca de WWE agradeció tanto el debutar contra el rapero en mayo del 2015.
My 2 boys The belt looks so big on him #kevinowens #owenowens#wweraw #wwe
Una foto publicada por Karina Steen (@karinaleilas) el
La alegría de Owen fue enorme cuando su padre debutó frente a Cena, pues sus héroes estaban juntos. Su emoción fue mayor aún al ver el triunfo limpio que obtuvo. Pero lo que vivió tras la victoria de su padre ha sido más que conmovedor. Durante minutos no podía creer que Kevin Owens era el hombre más grande de WWE.
Ya lo dijo Sami Zayn. Desde los inicios de Owens fue considerado uno de los mejores. "Si alguien merece estar en WWE es él", le decían sus colegas y amigos. "Lo hace desviviéndose por su familia", añadió en una entrevista a WWE.com. Y es que Owens será un villano cínico, pero Steen es probablemente el héroe más noble que pueda conocer en este momento la lucha libre.
I win.
— Kevin Owens (@FightOwensFight) 30 de agosto de 2016
First Day of Grade 3!!!! Doesn't he have the most awesome lunchbox??
Una foto publicada por Karina Steen (@karinaleilas) el
CAMPEÓN CONVINCENTE
Desde este espacio se habló en diversas oportunidades sobre las cualidades de Kevin Owens en el ring. Tiene la imagen de campeón duradero. Ya sea que esto venga de la mano de Triple H o no. Su futuro tiene todo un abanico de oportunidades que -como si se tratara de magia- le dio a WWE eso que tanto buscaba: generar expectación.
Desde hace mucho, Monday Night Raw no generó un capítulo que al terminar el público sintiera de inmediato: quiero que sea lunes para saber qué va a pasar. No es por el solo triunfo de Owens, también por el regreso de Triple H, la traición a Rollins, la reacción del público: "Te lo mereces", le cantaron a alguien que sobre el papel tiene que ser abucheado.
Congrats to @FightOwensFight
— Finn Bálor (@FinnBalor) 30 de agosto de 2016
We have been through it all together.
I've no doubt we will go through it all again pic.twitter.com/I7P7wqgFHy
I look forward to it. https://t.co/xlIoG71s95 pic.twitter.com/eO1VajSnu3
— Kevin Owens (@FightOwensFight) 30 de agosto de 2016
Esto hace notar dos cosas: que a WWE le importa cada vez menos las críticas de los entendidos y que empieza a consentir más al público fiel y duro de la lucha libre.
Kevin Owens es criticado por su peso. Desde Jim Cornette hasta Vince Russo consideran que su imagen no es la de un luchador que deba sobresalir. De hecho, es sabido que Vince McMahon tiene como perfil de campeón a alguien musculoso y bien parecido. Se creía que Triple H era de la misma escuela, pero parece que esta teoría se está desmoronando.
My initial reaction is maybe HHH is inserting himself into the brand split by pushing his own NXT guys. Could be interesting #WWE #Raw
— Mike Chiari (@MikeChiari) 30 de agosto de 2016
This Kevin Owens title run needs to have AT LEAST one Sami Zayn match involved.
— Daily DDT (@FanSidedDDT) 30 de agosto de 2016
El trabajo de Triple H en WWE es generar nuevo talento. Su labor en televisión es que la empresa no descuide el potencial de los perros de presa. Así, Rollins deja de ser el consentido para dar paso a su siguiente proyecto: Owens.
Esto se enmarca, posiblemente, desde la perspectiva de la apuesta por NXT. Triple H puede considerar que Monday Night Raw no está saciando las expectativas con su esposa y Mick Foley al mando. Con su incursión no solo lava el rostro del programa, también dota de un nuevo y gran protagonismo al campeonato máximo de la marca.
RECUPERANDO FRUSTRACIONES
Los planes para WrestleMania 32 eran enfrentar a Triple H y Seth Rollins en un duelo de maestro contra protegido. Esto se truncó con la lesión del arquitecto. Pero parece que han vuelto a ser tomadas como camino a futuro -dejando de lado y como pendiente a Roman Reigns.
Mientras que Owens en realidad no necesita de una nueva alianza. Su unión con Chris Jericho es notable y sería absurdo el desperdiciar la química y reacción que generan. Esto para hacer a la vez el papel clásico de los villanos: el ganar con trampas de terceros.
Congratulations to my best friend @FightOwensFight for winning the #WWEUniversalTitle! We are going to be a great champion!
— Chris Jericho (@IAmJericho) 30 de agosto de 2016
Regardless of my questions @FightOwensFight deserved my congratulations. Incredible match for the #Universal title. pic.twitter.com/QkJ9MkkKuY
— Mick Foley (@RealMickFoley) 30 de agosto de 2016
Congrats to the "nneeewww" WWE Universal Champion, @FightOwensFight ! #RAW
— Howard Finkel (@howardfinkel) 30 de agosto de 2016
Congratulations #KevinSteen #FightSteenFight pic.twitter.com/4g1LOunYk0
— ROH Wrestling (@ringofhonor) 30 de agosto de 2016
El monarca además tiene la increíble capacidad de narrar una partida de ajedrez como el suceso más dramático del mundo deportivo. Por lo que la capacidad de su opositor tiene que estar a la altura. Pese a que se trata de otro villano, el llamado por el contexto para ese papel es Seth Rollins. Pero es otro a quien todos quieren ver enfrentar.
Sami Zayn, se quiera o no, siempre estará en al vida de Kevin Owens. Su rivalidad es tan grande como su psicología en el ring. Una nueva disputa con el WWE Universal Championship generaría un nuevo morbo más que interesante. Sin embargo, el elegido tiene que ser Brock Lesnar.
Kevin Owesn fue ya presentado como the next big thing -sobrenombre también de Lesnar-. El duelo es algo que el propio Owens quiere. En una entrevista al podcast "Like Father, Like Son" que en una lucha perfecta en WrestleMania quiere medirse a la bestia encarnada.
"No hay nadie que se le parezca a Brock Lesnar, por la fuerza bruta, maldad y todo. Me gustaría ver si podría estar con él y ver lo mucho que podría lastimarlo", dijo Owens.
Este sería un duelo inédito con un enorme potencial. Si es con el título de por medio, hace de esta lucha algo espectacular. Es una idea plausible, pues el WWE Universal Championship está en proceso de crear prestigio, por lo que su primer reinado tiene que ser sólido -esto aunque el plan original era con Finn Bálor-.