En el Aula magna de la Universitat de Vic (Barcelona) se realizó el primer debate entre los candidatos a las elecciones del Barcelona. Acudieron cuatro de los cinco aspirantes, ya que Josep Maria Bartomeu, presidente saliente y candidato que presentó más firmas que nadie, decidió no aceptar la invitación.
El debate se dividió en cuatro apartados, de las que cada uno de los aspirantes dio a conocer su punto de vista
Sobre las medidas de crecimiento económico, Joan Laporta aseguró que “cuando era presidente el crecimiento fue del 300 por ciento y ahora es del 30. Hay que saber ser transparentes”. “Es complicado saber la realidad del club. Ellos hablan de ingresos totales, cuando deberían hacerlo por separarlo. Creo que nos encontraremos un club muy diferente del de 2003”, señaló Benedito en su primer minuto de intervención, algo que fue contestado por Toni Freixa, directivo saliente que afirmó que “la situación actual es mejor que la de 2010 y se ha rebajado la deuda en 200 millones”.
“Dejamos al mejor Barça de la historia”, apretó Laporta, que insistió en que “cambiaron lo de UNICEF por Qatar”. “Nos gastamos 285 millones en fichajes y la deuda va bajando; eso es algo que no entendí”, recriminó Benedito a Freixa, hasta hace poco directivo del club. “Pediría que las intervenciones fuesen rigurosas; los datos están firmados por auditores”, se defendió Freixa, que insistió y repitió un dato que ya expresó el día que anunció su proyecto de parcela económica: “El Bayern ingresa menos en el estadio, pero 109 millones más aprovechando el valor de su marca”.
“El Barça tiene muy buena salud económica, no hay que ser alarmistas. Qatar fue necesario gestionarlo por cómo estaba el club. Pero sabemos que hay una parte de los socios que nos les gustan y hay que dejarlo de lado. Lo tenemos detectado y buscaremos alternativas mejores”, remarcó Freixa.
“Qatar llega por interés económico del señor Sandro Rosell. Lo compran todo, desde aeropuertos, a bancos, hoteles y hasta Mundiales”, explicó Benedito. “Que se quiera justificar a Qatar no entra en nuestro juego. Se mintió, ya que primero se dijo que era Qatar Foundation y luego llegó Qatar Airways”, trató de intervenir Laporta, que no recordó que el contrato era con QSI por cinco años y que ese negociado qatarí estaba capacitado para mover la publicidad a su gusto.
El segundo punto de debate fue el Espai Barça y los proyectos patrimoniales. “El Camp Nou necesita una remodelación, pero la creación del Espai Barça me da miedo. No me puedo comprometer a invertir 600 millones de euros sin saber que no hay riesgo”, avanzó Benedito, que esta tarde explicará todos sus proyectos del área patrimonial. “Son 600 millones como máximo y se deben invertir sabiendo que el nombre del estadio está estudiado que se venda por 200”, replicó Freixa. “Lo que nos interesa es el Nou Camp Nou (nuevo Camp Nou). 85 estudios de arquitectura presentaron en su día sus proyectos, que quedaron 10 y finalmente fue el de Foster. Es necesario llegar a un consenso con la nueva alcaldía de la ciudad”, comentó Laporta.
“Si te dicen que te ponen un ático en el Passeig de Gràcia, con piscina, perfecto, ahora, si luego te dicen que te puedes arruinar tú y tu familia, la gente se lo pensará más. Es inviable. La gente no es consciente del riesgo que existirá. El referéndum fue un cuento chino. Por el camino podemos perder la identidad y ser como el Valencia, que por un estadio lo han perdido todo. Si hay una avería por el camino costará 300 millones. ¿Y entonces, qué? Vendrá el del turbante a rescatarnos”, insistió Benedito, que atendió con una sonrisa lo que dijo el representante de Seguiment FCB: “Lo que nos preocupa es que la primera gradería quedará reducida y no sabemos de qué costado, pero nos lo imaginamos”.
Laporta acusó a Freixa de ser “el submarino de Bartomeu”, diciendo que “está haciendo un discurso continuista. Es normal que Bartomeu no quiera venir, ya tiene a su representante”. “Hemos de acabar con el debate entre laportistas y rosellistas”, respondió Freixa que alegó que “evidentemente no soy un submarino de nadie y esto me lo tomo como una descalificación”. Benedito, entonces, rompió la baraja en bien de Freixa: “Les puedo asegurar que a Bartomeu no le ha gustado nada que ellos hayan conseguido las firmas para ser candidatos”.
“No puedo decir qué costó Neymar”, exclamó Freixa, que fue respondido por Laporta: “¿No lo saben? ¿No les informaban en Junta?”, trató de atacar el expresidente que fue reprendido por el que fuera portavoz de la Junta: “Nos informaban tanto como cuando tú eras presidente de la entidad”.
“No tenemos nada que decir en esta área”, dijo Marc Cornet, el enviado de Segumient FCB, que se quejó de que los jugadores “no saluden a los aficionados cuando viajan a ver los partidos”.
“Contamos con Abidal, Masip, Grimau, Cairo… Contamos con gente que sabe qué es el Barça y qué es sentir el Barça”, defendió Laporta.
“Con Abidal me reuní y hablamos mucho, así como con Norris y Grimau, aunque después de nuestro análisis decidimos ir a por otras personas”, analizó Benedito. “Nuestra área técnica la llevarán cinco personas, aunque habrá una persona que lo pilotará todo, aunque no es el momento de darlo todo”. “Si no se tienen nombres no se pueden dar”, replicó Laporta, que miraba de reojo a Benedito: “Tenemos que encontrar personas que entiendan el estilo Cruyff. Ya trajimos a Rijkaard, a Guardiola, etc… Conseguimos instalar al club en la victoria y en la excelencia futbolística. De ahí apostamos por gente que pueda transmitir bien eso”. “Usted está obsesionado con Cruyff. Siempre lo tiene en la boca”, atacó Benedito a Laporta, que no se amilanó: “Aún deberé decirlo más, ya que Johan es el envoltorio de todo”.
“Si me votan, que se prepare la gente, ya que haremos un baloncesto hegemónico en Europa de nuevo”, se soltó Laporta, que aprovechó para repasar de nuevo la nómina de ex deportistas del club encargados de llevar las secciones del Barcelona.
“Que nadie olvide que a los violentos los eché yo del Camp Nou”, recordó Laporta a la hora de hablar del área social