Mario Salas no eludió la responsabilidad en la dura derrota de Universidad Católica ante Audax Italiano por 3-0. El estratega sentenció que no pudieron leer lo que el partido requería, ante un rival que siempre estuvo muy concentrado.
"No estuvimos a la altura del rival que nos superó en todas las facetas, incluida la táctica fija. Quedamos en deuda para tratar de lograr un buen resultado. Hay que seguir trabajando para subir rendimientos individuales y colectivos, los que hoy no estuvieron a la altura del rival", sentenció un muy duro y autocrítico estratega.
"Pusimos al mejor equipo que teníamos para este partido, nunca hablé de rotación. Asumo el error y la responsabilidad de haber hecho mal los cambios", apuntó Salas.
Sin embargo, el técnico no le quitó mérito a Audax, ya que según su opinión, "trato de encontrar alguna opción de gol de nosotros, pero sólo encuentro el tiro en el palo de Cordero. El rival siempre alejó el balón de su zona defensiva, por eso no logramos tener la presencia que queríamos en su terreno".