En el mundo del fútbol, los autogoles son eventos desafortunados que a menudo quedan grabados en la memoria de los aficionados, pero el protagonizado por Samet Akaydin, defensa de la selección turca, ante Portugal, ha sido catalogado como uno de los más insólitos de los últimos años. Todo esto en el marco de la segunda fecha del Grupo F de la Eurocopa 2024, en el Estadio Signal Iduna Park de Dortmund.
Transcurrían 28 minutos de juego, ya Portugal ganaba 1-0 tras el gol de Bernardo Silva, cuando el escenario cambió drásticamente debido a un error inesperado que dejó a todos en el estadio y a los millones de espectadores frente a sus pantallas en un estado de incredulidad.
Cristiano Ronaldo corría hacia el área esperando un pase filtrado de su compañero Vitinha. Sin embargo, el pase del jugador del PSG no fue el mejor, quedando lejos de la perfección esperada. Esta jugada, aparentemente inofensiva, se transformó en una pesadilla para la defensa turca.
Samet Akaydin, en un intento de despejar el balón y evitar cualquier peligro, realizó un pase hacia su propio arco. En su mente, Akaydin pensó que su portero, Altay Bayindir, se encontraba en su posición habitual listo para recibir el pase. Sin embargo, no se percató de que Bayindir estaba fuera del área, posiblemente esperando interceptar un balón.
La falta de comunicación entre Akaydin y Bayindir resultó en una situación crítica. El pase de Akaydin no solo llevaba una dirección errónea, sino que además tomó por sorpresa al portero. A pesar de los esfuerzos desesperados de Bayindir por corregir el error y salvar el balón, fue demasiado tarde. El esférico cruzó la línea de meta, convirtiéndose en el segundo gol para Portugal en el partido.
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