El argentino llegó a Chelsea con planes muy claros: ser la sombra del arquero titular, Thibaut Courtois.
A los 35 años, Willy Caballero asume la etapa en la que está listo para desacelerar. Aunque estará en uno de los clubes más grandes del mundo, todo indica que el argentino tendrá una temporada sin demasiada acción. Chelsea lo compró para ser el segundo de Thibaut Courtois y él, acostumbrado a ser protagonista en todos los clubes en los que estuvo, parece dispuesto a cumplir ese rol de "segundo de".
Ni Champions League ni Premier League. Caballero podría tener algunos minutos en la FA Cup y la EFL Cup. En la última temporada, Conte no le dio muchas chances al segundo arquero del plantel, Asmir Begovic, y lo dejó afuera a partir de los cuartos de final de la FA Cup.
A diferencia de otros entrenadores, como Luis Enrique, Mourinho o Guardiola, Conte no ofrece muchas oportunidades a los arqueros que no son titulares en sus planteles.
Chelsea está satisfecho de incorporar a Caballero, que llegó a Manchester City para cumplir el mismo rol y luego le sacó el lugar a Claudio Bravo. Los Blues pretenden invertir mucho dinero en este mercado de fichajes, y ya comenzaron desembolsando por un jugador como Caballero, que no será titular. Claro, el argentino buscará presionar a Courtois (junto a Eduardo, el tercero en el orden de importancia y Gianluca Spinelli, el entrenador de arqueros). Willy es respetado en Inglaterra y en Chelsea es necesitado luego de la venta de Begovic al Bournemouth por 10 millones.
Todo indica que el argentino estará un año en el Chelsea, aunque el vínculo se podría extender. A su edad y momento en la carrera, parece en la situación perfecta.