Germán Lux (5): En el día de su vuelta al arco de River, tuvo altibajos. Arrancó bien, seguro y sin complicarse con los pies. Sin embargo, con el correr de los minutos, exhibió dudas, sobre todo en algunas salidas. En una de ellas trabó una pelota con un rival y la terminó sacando con lo justo, pero puso en peligro el arco de River. Y en la otra, retrocedió rápido cuando llegó un pelotazo y cuando quiso cubrir el primer palo perdió el equilibrio y se resbaló. Cristian Chávez, delantero de Guaraní tuvo el arco a su merced pero la tiró afuera. Al final del partido, Lux contuvo un par de pelotas sin dar rebote.
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Jorge Moreira (5): No tuvo demasiados inconvenientes en la marca, aunque alternó buenas y malas. Le faltó proyectarse. En ataque no aportó casi nada.
Jonatan Maidana (6): Si bien no tiene la velocidad de antes, estuvo sólido en la marca y concentrado para rechazar y realizar cruces providenciales para cortar situaciones de peligro para el arco de River.
Javier Pinola (5): Arrancó bien parado y anticipando a los rivales. Pero enseguida se cayó. No pudo acoplarse con Maidana, se le complicó la marca a Chávez y en varias jugadas quedó pagando como en ese pelotazo que le sobró y casi llega el 2-0 de Guaraní pero el ex San Lorenzo definió mal. Llegó a destiempo a disputar varias pelotas y habilitó a todos en el gol del equipo paraguayo. De no ser por el gol (es él quien empuja la pelota y no Alario) que le dio el empate a River la calificación hubiera sido menor.
Milton Casco (4): Por su sector vinieron las jugadas más peligrosas de Guaraní. Una vez más quedó expuesta su gran falencia: le ganan la espalda con facilidad. Intentó proyectarse pero no aportó demasiado en ataque.
Enzo Pérez (5): En el juego fue de menor a mayor. Le costó meterse en el partido y ser el jugador que le de claridad al mediocampo de River. Sobre el final del primer tiempo metió un desborde y un pase preciso para dejar a Nacho Fernández cara a cara con el gol. En los minutos que jugó en el segundo tiempo tuvo más participación y le hicieron dos faltas fuertes. Salió a los 24 minutos del segundo tiempo dado que en lo físico fue de mayor a menor y sintió cansancio.
Leonardo Ponzio (5): Tuvo un errático primer tiempo en el que le costó darle salida limpia a la pelota ya que los volantes de Guaraní lo presionaron bien. En las divididas ganó y perdió. En el segundo tiempo mejoró en la contención.
Ariel Rojas (4): Flojo partido del Chino. No le dio buen destino a la pelota, algo que no es habitual en él. Estuvo impreciso. Y eso afectó al circuito de juego de River.
Ignacio Fernández (4): Más adelantado en el campo de juego, también cayó en la imprecisión, lo cual atentó a la fluidez que River busca en la mitad de la cancha. Pidió la pelota e intentó jugar pero se lo vio un poco desorientado. Y definió mal en una jugada cerca del final del primer tiempo en la que Enzo Pérez lo dejó de frente a la arco cuando él ingresaba por la derecha al área.
Gonzalo Martínez (6): Movedizo e inquietante, el Pity fue el único punto alto del mediocampo. Intentó desequilibrar por la izquierda y también se corrió al medio para entrar más en juego. Combinó bien varias pelotas con Alario y un remate suyo hizo exigir al arquero de Guraní en la primera mitad. Ejecutó bien las pelotas paradas, como el corner que derivó en el gol. Le faltó explosión y profundidad.
Lucas Alario (7): Siempre está. Aunque no convierta. Aunque lleve 9 partidos sin poder hacer un gol. Aunque haya gritado un gol que parecía suyo pero que fue de Pinola. Alario estaba ahí para empujarla o para patear la pierna de Pinola y ayudarlo a meter la pelota en el arco. Pero no sólo es eso el Pipa. Pivoteó muy bien cuando le tocó jugar de espaldas al arco. Tuvo su gol con un frentazo que se fue cerca tras un centro de pelota parada de Pity Martínez. Bajó muchas pelotas de cabeza con criterio y desgastó a los defensores rivales. En un partido malo de River y ordinario en general, eso le alcanzó para ser la figura.
Ignacio Scocco (6): Entró bien en el partido. Con su ingreso (salió Enzo Pérez), River cambió el sistema y pasó a jugar 4-4-2. Si bien el equipo no generó mucho más en ataque, sí hubo una sensación de que tenía más presencia ofensiva y que podía llegar una jugada peligrosa en cualquier momento. Se conectó bien con Alario y tuvo la chance de convertir con un tiro libre bien ejecutado que se fue cerca del palo derecho del arco que da a la tribuna Centenario.
Carlos Auzqui (-): Ingresó por el Pity Martínez para jugar los últimos minutos, por eso no tiene calificación. Entró poco en juego y no pudo aprovechar su velocidad en los últimos metros.