Sebastián Sosa, arquero uruguayo de Independiente, dio positivo de COVID-19 en el test PCR, según informó el Rojo en sus redes sociales, por lo que se confirma que no jugará el clásico ante Racing. El futbolista reconoció en entrevista con “Último al arco” de radio Sport 890 que había comenzado a sentirse mal antes del último partido contra Talleres.
“El sábado a la mañana para el partido con Talleres me desperté con algunos dolores, con pocas ganas de levantarme de la cama y como con un cuadro gripal”, señaló Sosa el pasado lunes, día en que llegó al entrenamiento del Rojo pero no llegó a entrenar porque el test rápido le dio resultado positivo.
El uruguayo estaba a la espera del PCR para saber si era un falso positivo o si se trataba de un caso confirmado de COVID-19, lo que terminó dándose este martes. Independiente también confirmó que el entrenador Julio César Falcioni, así como los futbolistas Patricio Ostachuk, Domingo Blanco, Ezequiel Muñoz y Diego Segovia también habían dado positivos en los testeos rápidos. Además de Falcioni, que entrenó al equipo contra Talleres el sábado, Ostachuk y Blanco estuvieron entre los convocados en ese partido.
Malas noticias para el Rojo antes del clásico: Sebastián Sosa, positivo de COVID-19
Nicolás Brusco informó que el arquero de Independiente se contagió en la antesala al choque con Racing.
Sosa ya había tenido el virus en julio de 2020 cuando todavía jugaba en el Mazatlán de México.
Sobre este hecho, Sosa dijo en la mencionada entrevista que tres meses después de haberlo contraído se hizo un test para ver si tenía anticuerpos y ya no tenía, “como si no hubiese tenido el virus”, señaló.
Sosa también se refirió al dolor que le causa perderse su primer clásico de Avellaneda contra Racing. “Era un gran objetivo. Cuando llegas a este club sabés que hay un clásico importantísimo contra Racing y estaba con la ilusión de jugarlo. Desde que llegué sé lo lindo que es jugar esa clase de partidos y lo estaba deseando. Lo primordial es la salud, estar bien; y lo deportivo, por más que tenga una bronca y una amargura terrible, pasa a segundo plano”, señaló.