El líder se aferra a la primera plaza del Campeonato Nacional cosechando una nueva victoria en casa. Colo Colo acaba de ganar su quinto encuentro consecutivo frente a Deportes Antofagasta, y lo ha hecho a golpe de posesión y con un golazo de Juan Martín Lucero, que ponía el 1-0 definitivo en el electrónico al arrancar el segundo periodo. El término de la jornada deja al Cacique en lo más alto de la tabla con una ventaja de seis puntos sobre Ñublense, el perseguidor directo. A nueve jornadas de que finalice la liga, los albos siguen siendo favoritos entre las mejores casas de apuestas, donde los pronósticos vaticinan que levantarán el trofeo de campeón poniendo más distancia de por medio. Eso sí, todavía restan fechas complejas por resolver; entre otros, quedan los choques contra Palestino, Universidad Española y Curicó Unido, que apuran sus opciones en la lista de los cinco primeros clasificados.
Comenzó el duelo en el Estadio Monumental con la intensidad que suele darse entre quien desea confirmar liderazgo y quien necesita sumar puntos para salir de los puestos de descenso. Esta fue la casilla de salida entre Colo Colo y Antofagasta, dominados en todo momento por sus exigencias particulares. A los dos minutos de juego tuvo la primera ocasión el conjunto albo por medio de Leonardo Gil. El mediocampista recibió un pase de Gabriel Costa en la frontal, consiguió deshacerse de dos defensores dentro del área y acabó sacándose un disparo cruzado que terminó saliendo fuera por muy poco. Primer aviso y vuelta a empezar.
La presión alta y el ataque por las bandas empezó a ser una constante en los de Gustavo Quinteros. Fue precisamente en el minuto seis cuando llegó la segunda ocasión por el carril derecho. Un centro de Bouzat al corazón del área provocó el rechace defectuoso de la defensa visitante y este fue recogido a un metro del punto de penalti por Alexander Oroz, que ya sin oposición alguna envió la pelota muy por encima del arco defendido por Diego Sánchez.
Los titubeos defensivos de Antofagasta, unidos a la velocidad y la capacidad de reacción del Cacique, fueron determinantes para que la posesión cayera en manos de los locales. A pesar del dominio en contra, también los Pumas gozaron de alguna oportunidad de adelantarse en el marcador antes del primer cuarto de hora.
La tuvo el argentino Tobías Figueroa de cabeza, que tras una asistencia lejana de Ariel Uribe logró romper las marcas de Falcón y Zaldivia dentro del área y sacar un remate mordido que ya sin velocidad ni dirección terminó marchándose por la línea de fondo. Dos minutos más tarde lo intentó de nuevo el equipo de Javier Torrente. Un saque lateral desde el costado derecho propició el despeje defectuoso de la zaga santiaguina dentro del área pequeña. El rebote lo aprovechó Maikol Sánchez con un disparo a media altura que supo detener Brayan Cortés, bien situado durante toda la jugada.
Las llegadas de ambos equipos estaban fijando el rumbo del encuentro hasta ese momento. Recuperó pronto Colo Colo la circulación en el centro del campo con el toque y la precisión de Pavez, Gil y Costa. Esto ayudó a que el líder pusiera una marcha más y estuviera al borde de inaugurar la distancia. Una triangulación que nacía en campo propio ponía en carrera por la banda derecha a Oroz, que supo dejar atrás a sus adversarios, adentrarse en el área a base de desborde y recortar al último defensor antes de sacar frente a Diego Sánchez un lanzamiento que terminó lamiendo el palo corto. Verticalidad impecable, sí, pero acompañada de una definición que promete poco de cara al gol.
Después de varios intentos frustrados de abrir el marcador, fue Esteban Pavez el que decidió probar suerte desde larga distancia. El volante chileno se inventó un derechazo espectacular en el minuto veintiocho y a treinta metros de la portería de Diego Sánchez, que tuvo que intervenir con decisión para repeler la pelota y evitar el primero de la noche. La réplica albiceleste vino siete minutos más tarde de la mano de Figueroa, cuyo lanzamiento desde la frontal fue ajustándose al palo izquierdo hasta que se hizo necesaria la intervención de Brayan Cortés, que detuvo en dos tiempos. La última jugada de peligro de la primera mitad la tuvo Matías Zaldivia con un nuevo testarazo a quemarropa tras un córner medido de Gabriel Costa. La pelota se paseó por el área pequeña sin encontrar rematador alguno. Empate sin goles para llegar al descanso.
La vuelta de los vestuarios dejó cambios en el dibujo de Colo Colo, y es que el técnico local vio oportuno que Cristián Zavala ingresara en el terreno de juego en sustitución de Alexander Oroz. El movimiento ofensivo supuso una mayor proyección en la zona de tres cuartos, y fue precisamente ahí donde estuvo el origen del 1-0. Esteban Pavez elaboró un pase filtrado para el Gato Lucero, que controló el esférico en la medialuna rival y armó un cañonazo imparable a baja altura para romper la igualada. Poco pudo hacer Sánchez ante la genialidad del delantero argentino.
El tanto a favor sirvió de estímulo al Cacique, generándole una mayor soltura en la creación de juego y facilitándole incluso la llegada a meta de una forma más continuada. Ayudó también la expulsión de Andrés Robles en el cincuenta y cuatro, que dejó a Antofagasta con diez jugadores y mucho partido por delante. Los albos intentaron agrandar la cuenta con el escenario a favor y tuvieron momentos para creer en el segundo. Los más claros llegaron de las botas de Gil, primero en el 66 con un disparo lejano y luego en el 77 con un tiro raso que se fue rozando el poste izquierdo. Resistió el 1-0 hasta el pitido final. La victoria le permite a Colo Colo mantener la ventaja con el segundo clasificado, al mismo tiempo que supone el hundimiento de Antofagasta en la zona de descenso.