La actualidad de River en la Copa Libertadores es muy diferente a la que transita en la Liga Profesional. El equipo de Martín Demichelis es cómodo puntero en el campeonato local, con seis puntos de ventaja sobre San Lorenzo, el único escolta transitadas ya 14 fechas, la mitad del toreno. Pero en la Copa, la durísima derrota frente a Fluminense lo dejó en la última posición del Grupo D. Lo positivo dentro del flojo panorama fue la posterior victoria de Sporting Cristal sobre The Strongest. ¿Por qué? Porque ese resultado dejó a Fluminense cortado en la punta y a los otros tres equipos en la misma línea, con tres unidades.
Así, entonces, si bien River marcha último en su zona por diferencia de gol, la paridad de puntos hace que la clasificación a octavos de final dependa de sí mismo. Eso sí, debe empezar a ganar si quiere mantener las chances de pasar a la siguiente fase. El objetivo pasadas las tres primeras jornadas pasó a ser quedarse con el segundo lugar del Grupo D porque Fluminense ya está encaminado para ser el primero.
Por supuesto que si River consigue ganar los tres partidos que le quedan estará entre los 16 equipos que avancen a los octavos de final. Tampoco dependería de nadie si suma 7 de los 9 puntos que quedan en juego. Pero si suma 6 de los 9 empezará a utilizar la calculadora y ver cómo les va al resto para definir su futuro. Y en ese sentido el panorama de complica teniendo en cuenta que hoy es el equipo con peor diferencia de gol del Grupo D.
El próximo compromiso de River será visitando a Sporting Cristal en Perú (el 25 de mayo) casi con la obligación de ganar. Luego recibirá a Fluminense en el Monumental, donde un empate lo pondrá en la obligación de superar a The Strongest en la última fecha, también como local. Un dato importante para tener en cuenta es que al conjunto boliviano le esperan dos encuentros en la altura de La Paz, por eso esa jornada final en el Monumental sería imprescindible ganar para superarlo en caso de que The Strongest gane sus próximos dos partidos.