Santa Fe respira, pero está en cuidados intensivos. Su campaña ha sido tan floja, tan irregular, que lo sorprendente es que hoy, con dos partidos por jugar, todavía esté con vida. Con 23 puntos y 6 en juego, no es nada sencillo clasificar, pero ahí está su opción. Lo primero será que venza este viernes de visita al descendido Atlético Huila (6 p. m.). Entonces podrá sentarse a rezar a ver si el milagro se le da en la última fecha, cuando debe vencer al Once Caldas y esperar.
Santa Fe está en crisis. No gana hace 4 partidos, no gusta, anda de pelea con el gol, su nuevo DT, Pablo Peirano, apenas lleva dos partidos y dos derrotas, viene de perder el clásico contra Millonarios y, sin embargo, pese a todo ese panorama oscuro tiene una luz encendida para meterse en los cuadrangulares. “La posibilidad está, es difícil, pero está, y vamos a seguir buscando esa clasificación”, dijo Peirano al perder el clásico.
Las cuentas en rojo
A Santa Fe le quedan dos partidos, contra Huila este viernes, y contra Once Caldas, de local en la fecha 20. Es decir que lo máximo a lo que puede aspirar es a 29 puntos. Pero la tabla ahorca. Junior y Cali son séptimo y octavo, respectivamente, con 27 puntos, y son los que tienen la mejor opción para estar en cuadrangulares. Dependen de sí mismos. Son el punto de referencia para Santa Fe, que debe ganar sus dos partidos.
Si lo hace, esperará que en la fecha 20 Junior no le gane de local al Huila, o que Cali no le gane de visita a Chicó, otro eliminado. Es decir, si se cae uno de los dos y Santa Fe hace sus seis puntos, se mete en las finales.
Esto, lo que demuestra es que el campeonato sigue siendo muy generoso con equipos que no han mostrado suficiente solidez. Para los cardenales incluso el milagro empezó a tomar forma porque Pasto no le ganó al Medellín (0-0) y se quedó con 24 puntos, y Alianza Petrolera perdió en su visita a Atlético Nacional (2-0) y se queda en 25.
Así las cosas, si Santa Fe gana sus dos partidos finales, no le importará lo que pase ni con Pasto ni con Alianza ni con La Equidad (23) ni con Bucaramanga (23). Su único objetivo será rezar para que o Junior o Cali tropiecen. Ahí está su opción. Pero lo primero es lo primero: ganar este viernes.
PABLO ROMERO
Redactor de EL TIEMPO
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Santa Fe respira, pero está en cuidados intensivos. Su campaña ha sido tan floja, tan irregular, que lo sorprendente es que hoy, con dos partidos por jugar, todavía esté con vida. Con 23 puntos y 6 en juego, no es nada sencillo clasificar, pero ahí está su opción. Lo primero será que venza este viernes de visita al descendido Atlético Huila (6 p. m.). Entonces podrá sentarse a rezar a ver si el milagro se le da en la última fecha, cuando debe vencer al Once Caldas y esperar.
Santa Fe está en crisis. No gana hace 4 partidos, no gusta, anda de pelea con el gol, su nuevo DT, Pablo Peirano, apenas lleva dos partidos y dos derrotas, viene de perder el clásico contra Millonarios y, sin embargo, pese a todo ese panorama oscuro tiene una luz encendida para meterse en los cuadrangulares. “La posibilidad está, es difícil, pero está, y vamos a seguir buscando esa clasificación”, dijo Peirano al perder el clásico.
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A Santa Fe le quedan dos partidos, contra Huila este viernes, y contra Once Caldas, de local en la fecha 20. Es decir que lo máximo a lo que puede aspirar es a 29 puntos. Pero la tabla ahorca. Junior y Cali son séptimo y octavo, respectivamente, con 27 puntos, y son los que tienen la mejor opción para estar en cuadrangulares. Dependen de sí mismos. Son el punto de referencia para Santa Fe, que debe ganar sus dos partidos.
Si lo hace, esperará que en la fecha 20 Junior no le gane de local al Huila, o que Cali no le gane de visita a Chicó, otro eliminado. Es decir, si se cae uno de los dos y Santa Fe hace sus seis puntos, se mete en las finales.
Esto, lo que demuestra es que el campeonato sigue siendo muy generoso con equipos que no han mostrado suficiente solidez. Para los cardenales incluso el milagro empezó a tomar forma porque Pasto no le ganó al Medellín (0-0) y se quedó con 24 puntos, y Alianza Petrolera perdió en su visita a Atlético Nacional (2-0) y se queda en 25.
Así las cosas, si Santa Fe gana sus dos partidos finales, no le importará lo que pase ni con Pasto ni con Alianza ni con La Equidad (23) ni con Bucaramanga (23). Su único objetivo será rezar para que o Junior o Cali tropiecen. Ahí está su opción. Pero lo primero es lo primero: ganar este viernes.
PABLO ROMERO
Redactor de EL TIEMPO