Debido a la alta demanda y la escasez del agua potable, se está poniendo en riesgo este recurso para las próximas generaciones. Es por ello que, se debe tomar las medidas necesarias para que haya una debida gestión sostenible del agua. En este sentido, se estima que para el año 2050, 51 de los 164 países presenten un nivel de estrés hídrico que va desde lo alto hasta extremadamente alto, según las proyecciones del World Resources Institute (WRI).
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¿Qué países no tendrán suficiente agua para el 2050?
El acceso al agua potable es un derecho fundamental, pero para el año 2050, el 31% de la población mundial podría sufrir de escasez de este elemento.
Cada vez más es una realidad, el estrés hídrico que habrá en diversas regiones del planeta, particularmente en países de Europa como Portugal, España e Italia. De acuerdo a los expertos, esta situación podría empeorar para el 2050 si es que desde antes no se toman las medidas urgentes.
Cabe mencionar que el cambio climático, la deforestación y el crecimiento de la población han contribuido a agravar esta situación, que amenaza con volverse peor en los próximos años.
La situación en Irán, la India y la mayoría de los países del norte de África como Argelia, Egipto y Libia también es preocupante pues se estima que para el año 2050, estos países también consumirán al menos el 80% del agua disponible en sus territorios.
¿En qué posición de estrés hídrico se encuentra el Perú?
De acuerdo al ranking de estrés hídrico de los estados miembros de las Naciones Unidas, el Perú se encuentra en el puesto 66 de la lista, con una demanda alta entre el 40%-80%. Mientras que unos estudios realizados por Statista, Colombia es uno de los lugares con menor estrés hídrico en el mundo, su tasa de consumo, se estima que será inferior al 10% para el año 2025.
Por otro lado, la situación hídrica en países del África como la República del Congo, Camerún y la República Centroafricana, es cada vez más grave. Estas naciones tienen una demanda de agua que supera con creces de la que hay disponible. La escasez del agua es una realidad para millones de personas en estos países, lo que pone en riesgo su salud, seguridad alimentaria y calidad de vida.
Los expertos señala que para evitar esta crisis hídrica se deben establecer políticas y regulaciones que fomenten la conservación y el uso eficiente del agua, así también como medidas para proteger los recursos.