No hay un acuerdo entre la dirigencia de la Federación Ecuatoriana de Fútbol –manejada por Francisco Egas–; no saben qué técnico conseguir para la Selección y las eliminatorias al Mundial de Catar 2022, que empezarán en marzo del 2020. Debe haber un consenso en el directorio, pero es Egas quien preside la Ecuafútbol y sobre él cae la responsabilidad de no haber contratado ya a un DT.
Por no haber acuerdos internos se ha dilatado la contratación del técnico para la Tricolor. Con Jorge Célico debieron ser claros y decirle “usted va a dirigir a la sub-20 y a la sub-23 porque está capacitado para eso. Sus resultados son los mejores conseguidos por un adiestrador de categorías menores y tiene que dedicarse a eso”. Célico tiene la ilusión de ser el conductor de la mayor, pero me parece que están mal las declaraciones que dio. A un entrenador se lo contrata por sus resultados y en la primera división Célico no ha obtenido resultados.
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Para dirigir a la selección absoluta debe tener un esquema táctico distinto al que utilizó cuando estaba en Universidad Católica. Cuando Célico dirigió a los camaratas ese fue el equipo más goleado. Cuando estuvo en la Selección, en el cierre de la eliminatoria a Rusia 2018, los jugadores se le salieron antes de un partido importantísimo contra Argentina y se perdió 3-1.
Ha dirigido últimamente como interino y fue goleado por Argentina (6-1). En la Selección lo que se necesita es un estratega, pero ya, de inmediato. No puede pasar más de una semana para que se contrate al técnico de Ecuador para que venga y comience a trabajar con la absoluta.
A Célico deben dejarlo con la Tricolor de menores, donde ha alcanzado logros. Deben acabarse los desacuerdos entre los miembros del directorio de la FEF, porque por eso no han fichado al entrenador y han dejado pasar mucho tiempo. Creo que Célico tiene propuestas de clubes grandes de Ecuador, por los éxitos en la sub-20, que son indiscutibles. Pero una cosa es dirigir a equipos y otra a selecciones.
A Jorge Célico deben dejarlo con la Tricolor de menores, donde ha alcanzado logros. Cuando estuvo en la mayor se le escaparon jugadores y ahora, como interino, recibió una goleada.
Egas es quien debe tomar las decisiones sobre el nuevo entrenador, porque él es el presidente de la Federación. Si no llegan a acuerdo los miembros del directorio, Egas debe tomar el mando y decir “este es el técnico que quiero”. Con todo el respeto que Egas merece, creo que le ha quedado un poquito grande el cargo de presidente de la Ecuafútbol. Debe decidir, como lo hacen los presidentes de la todas la federaciones. El respaldo de los miembros del directorio está dividido y Egas no puede tomar una decisión.
Pienso que en estos días Egas ya debe liderar a la Federación Ecuatoriana de Fútbol como su presidente, como la máxima autoridad. Él tiene la responsabilidad de contratar a los entrenadores de las selecciones nacionales. Egas debe decidirse y manejar a la Ecuafútbol con su propia capacidad y criterio. Él fue elegido para presidir al balompié nacional y debe tomar las riendas en cuanto al profesional que va a asumir el mando de la selección mayor.
Puede haber oportunidad de clasificar al Mundial 2022 porque hay medio cupo más, pero Egas y el nuevo entrenador deberán pensar ciertas cosas. El presidente de la FEF aseguró que no volverán nunca más los futbolistas que tuvieron problemas disciplinarios en la Copa América de Brasil 2019, pero varios de ellos están en el mejor momento de sus carreras.
Esas declaraciones de Egas fueron apresuradas. Han existido muchos casos de jugadores en el mundo que han tenido inconvenientes, pero han vuelto a sus selecciones por su capacidad. Egas debe reaccionar de cara a las eliminatorias y conseguir ya al DT. (O)