Las rastas de Marco Angulo, de 17 años, resaltan en el entrenamiento de la categoría sub-18 de Independiente del Valle, en el complejo de Chillo Jijón (nororiente de Quito), y ese es un distintivo especial que, dice, lo lleva con orgullo por años.
Nació en Rocafuerte y él es uno más de esa pléyade de futbolistas afrodescendientes que engrosan las formativas del club de Sangolquí, donde la gran mayoría llegan desde las provincias de Esmeraldas y Guayas, destaca el gerente Santiago Morales.
Angulo no dudó en decir sí cuando un cazatalentos del club de Sangolquí le propuso venir a Chillo Jijón, en una tarde cuando entrenaba en la escuela de fútbol de Rocafuerte (parroquia rural del cantón Rioverde, de Esmeraldas), hace unos tres años. Desde que llegó ya suma tres títulos nacionales.
En otra cancha, de las ocho que usan los juveniles, Jadiel Corozo, de 11 años, no se cansa de ensayar cabezazos. Sus ojos brillosos y vivaces evidencian sus ilusiones. "Vengo desde Borbón (Esmeraldas) y sé que puedo quedarme", dice con convicción, el menudo volante interior, como se autodefine.
Jhon Jairo Angulo, Roberto Cabezas, Hamilton Caicedo, Jamilton Carcelén, Byron Gacía y muchos más, igual, no vacilaron en dejar Esmeraldas para venir "a luchar por un sueño", afirman a este Diario, en un recorrido por las formativas.
De Guayas, hay jugadores como el goleador Daniel Bravo, Clarencee Borja, Jimmy Ayoví, Carlos Arroyo...
"De esas provincias proviene la mayoría, y en el caso de Guayas el mayor número son afrodescendientes", resalta Morales, y luego cuenta que Manabí y Los Ríos también son canteras fuertes.
De Pichincha son muy pocos, y uno de ellos es el artillero quiteño Alan Minda, de 16 años, quien ha marcado en esta temporada 4 goles en la sub-18 y 27 en la sub-16.
Al ser Esmeraldas y Guayas de donde más llegan los futbolistas adolescentes y jóvenes, Independiente tiene escuelas permanentes en esos lugares. "Se trabaja con chicos menores entre 6 y 10 años, y cuando llegan a los 11 los traemos (a Chillo Jijón). Otros, en cambio siguen jugando torneos en sus provincias, bajo nuestra observación", explica.
Asegura no conocer el número de cazatalentos que tienen regados en el país, pero indica que "es un número importante" que trabaja bajo las directrices del director de las formativas, el español Iván Vázquez.
¿Por qué se buscó la metodología europea?, se le consulta. "Por el modelo de juego que se plantea Independiente, que es diferente al resto de equipos del Ecuador. No con ello decimos que es el mejor, pues cada institución puede plantear su modelo, pero nosotros nos hemos ido por el estilo europeo", detalla.
Incluso, el primer equipo tiene al español Miguel Ángel Ramírez como entrenador. Antes de que asuma ese cargo, él era el director de las formativas, pero ascendió tras la renuncia del también ibérico Ismael Rescalvo, que se fue a Emelec. (D)