El valor de mercado de la plantilla del Osasuna ha crecido un 116% desde marzo de 2020
Cuando en marzo de 2020 la Covid-19 paralizó el mundo, el CA Osasuna era un equipo que acababa de retornar a Primera División con el objetivo de afianzarse en la categoría para dar estabilidad a la entidad. Un plan que, más de tres años después, se puede decir que ha dado resultado. El cuadro rojillo ha aumentado el valor de su plantilla un 115,9% desde entonces, pasando de ser el 14º equipo más valioso (con 63,6 millones de euros) a cerrar el top 10 de LaLiga. Ningún club de los que militan en la competición española desde aquel 2020 ha crecido tanto porcentualmente. Ahora mismo, el vestuario navarro acumula un valor de mercado total de 137,3 M€.
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A pesar del mazazo que supuso la pandemia para las arcas de todos los equipos, lo cierto es que los pamplonicas han sabido sacar provecho de la situación, teniendo un incremento notable desde entonces, pero aumentando de una manera más bien constante. Un desarrollo que se venía fraguando desde la llegada de Braulio Vázquez a la dirección deportiva osasunista en 2017.
Braulio, que un año después de su arribo a Pamplona firmó a Jagoba Arrasate y le mantuvo en el puesto incluso cuando había muchas voces que aconsejaban su relevo, ha sabido adaptarse a las circunstancias para no sólo mantener al Osasuna en Primera, sino para hacerlo de manera holgada a la vez que ha ido revalorizando su plantilla.
Así las cosas, desde el verano de 2020, el CA Osasuna ha ido retocando su nómina dando salida a jugadores que no contaban o que se daban por amortizados, mientras que ha ido firmando a futbolistas con un valor de mercado notablemente más alto. En verano de 2020, Fran Mérida (1,2 M€) fue el profesional más cotizado que salió de El Sadar. Entonces llegaron en propiedad tres jugadores con una tasación igual o superior como fueron los casos de Lucas Torró (2,4 M€), Raúl Navas y Enric Gallego (ambos valorados en 1,2 M€).
Un curso después, el 2021-22, el club rojillo se desprendió de Adrián López (1,2 M€), Facundo Roncaglia y Enric Gallego (1 M€), entre otros, dando entrada a cinco fichajes con un valor de mercado superior al millón de euros entre los que destacaron Ante Budimir (8 M€), Kike García (2,8 M€) y Cote (1,5 M€). Aquella temporada el vestuario osasunista cotizaba por encima de los 93 millones de euros.
En la campaña 2022-23 la tendencia se mantuvo. Mientras que salieron Roberto Torres (2 M€) y Cote (1,5 M€), las llegadas más destacadas fueron las de Moi Gómez (8 M€), Rubén Peña y Aitor Fernández (2,5 M€ cada uno). El buen hacer a la hora de confeccionar la plantilla se reflejó sobre el césped ya que los navarros disputaron la segunda final de la Copa del Rey de su historia y se clasificaron para las rondas previas de la Conference League.
Por último, esta temporada el equipo dirigido por Arrasate ha perdido a Kike García (1,8 M€) y Aridane Hernández (1 M€), mientras que ha fichado a jugadores como Alejandro Catena (8 M€), Raúl García (4 M€) o José Arnáiz (3,2 M€) entre otros, lo que ha servido para elevar nuevamente el valor total de la plantilla.
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David García, uno de los tres jugadores por encima de los 10 millones
La plantilla rojilla cuenta este curso con tres futbolistas por encima de los 10 millones de euros de valor de mercado, destacando entre ellos David García con 20 M€. Unos profesionales de los que Braulio Vázquez presumió tras el cierre del pasado mercado. "Tenemos a Aimar Oroz, que ha sido subcampeón de Europa con la sub-21; a Jon Moncayola, plata olímpica en Tokio; a David García, internacional con la absoluta; a Moi, al Chimy Ávila... vamos a valorar lo que tenemos y que no siempre lo tendremos", comentó en rueda de prensa.
No en vano, sólo el curso pasado tuvo más futbolistas tasados en 10 millones de euros o más, ya que además de David García, Aimar Oroz (15 M€), Moncayola (12 M€) y Moi Gómez (10 M€), que siguen este curso, tuvo en sus filas a los cedidos Manu Sánchez (10 M€), y Abde Ezzalzouli (15 M€). Un dato que contrasta con el vestuario de la campaña 2019-20 cuando sólo el Chimy llegaba a los 10 millones de euros.
