Arabia Saudita ha revolucionado el fútbol en menos de un año. Todo empezó el 31 de diciembre pasado, cuando el Al Nassr anunció por todo lo alto a Cristiano Ronaldo. Luego, jugadores de la talla de Neymar, Sadio Mané, Marcelo Brozovic, Sergej Milinković-Savić, entre otros, siguieron los pasos del delantero portugués. Semejante panorama ha empezado a preocupar y desesperar a algunos clubes europeos, que por temor a perder más estrellas, piden una regulación para los millones de euros de Medio Oriente. Ese es el caso de Jürgen Klopp.
En conferencia de prensa previa al partido frente a Bournemouth, por la segunda fecha de la Premier League, el entrenador del Liverpool criticó el papel de Arabia Saudí en este mercado de fichajes, dijo que el dinero ilimitado es un problema y pidió algún tipo de regulación al respecto.