Osorio hace olvidar las 'pesadillas' de Sven y el Chepo

En el Hexagonal final rumbo a Rusia 2018, la selección mexicana mantiene un invicto con tres victorias y un empate.

Su camino hacia la Copa del Mundo inició con un triunfo 2-1 ante Estados Unidos en el Mapfre Stadium, estadio que era considerado un territorio hostil a inicios del milenio. El empate a ceros ante Panamá supuso un aparente desconcierto ante los aficionados del Tricolor, el cual fue calmándose poco a poco con las victorias 2-0 ante Costa Rica en el Estadio Azteca y el 1-0 sobre Trinidad y Tobago.

Estos resultados colocan al equipo dirigido por Juan Carlos Osorio en la cima del Hexagonal con diez puntos, tres más que el conjunto tico, su más cercano seguidor y, de mantener este ritmo, podrán amarrar  el liderato de la Concacaf y su boleto al próximo certamen futbolístico.

A estas alturas del Hexagonal, el panorama para la selección mexicana era muy distinto al que se vive. En las eliminatorias rumbo a Sudáfrica 2010, el combinado azteca, que inició bajo las órdenes de Sven Göran Eriksson, debutó con una derrota 2-0 ante Estados Unidos. Aunque retomaron confianza con un triunfo 2-0 ante Costa Rica, la derrota sufrida ante Honduras (3-1) fue suficiente para que el sueco dejara el cargo. El cuarto partido –ya con Javier Aguirre en el timón- terminó en una derrota 2-1 ante El Salvador.

Con estos cuatro resultados, México acumulaba únicamente tres puntos, lo que los colocaba en el quinto peldaño de la tabla, una posición fuera de lugares mundialistas y de repechaje.

La situación rumbo a Brasil 2014 también fue crítica. El Tri de José Manuel de la Torre inició con tres empates, dos de ellos sin goles en el marcador, y una victoria 1-0 ante Jamaica, lo que los colocaba en el cuarto lugar de la tabla con seis puntos y con la posibilidad de calificar por el repechaje. El ‘Chepo’ duró tres partidos más en el cargo, hasta que las cosas se complicaron para el combinado nacional.