La medalla de plata obtenida en la Serie Mundial de clavados, realizada en Windsor, Canadá, es para Rommel Pacheco y Jahir Ocampo un parámetro en sus aspiraciones para clasificar al Campeonato Mundial de Budapest, e ir en busca del podio, lo cual ya lograron en la edición de Barcelona 2013.
"Pudo ser oro esa medalla, pero tenemos esa tranquilidad de que nos colgamos una presea en un evento internacional. Pienso en el objetivo de cada año y en este 2017 es el Mundial, y obviamente estándo ahí, hay que pelear las medallas. Hemos empezado bien el ciclo olímpico, es un escalón y hay que cerrar bien con los eventos que están en puerta", declaró Jahir Ocampo.
Mientras tanto, Pacheco mencionó que el trabajo en el sincronizado va por buen camino, y ahora solo falta definir detalles en el aspecto individual.
"También en individual tuve una muy buena semifinal, arriba de todos los demás clavadistas, y eso es importante porque ya se viene el nacional. Tuvimos un periodo bastante largo de descanso, después de los Juegos Olímpicos de Río 2016, y todo es un proceso, por lo que hay que retomar las bases. Es cuestión de madurar la salida y eso me ayudará para tener mejores puntuaciones", mencionó Rommel.
Ocampo no ha competido en este año de manera individual, pero no es algo que le preocupe al clavadista. En las cuatro fechas de la Serie Mundial solo tuvo el derecho de participar en sincronizados, ello debido a que en Río de Janeiro solo compitió en esa prueba.
"En lo individual me falta agarrar ritmo competitivo, pero sigo en preparación constante para llegar a buen nivel al evento. En la Serie Mundial porque cambiaron ciertas reglas en el cual yo no podía entrar así nada más", mencionó Jahir.
Los clavadistas son fuertes candidatos para quedarse con esos lugares para el Mundial, que se realizará del 14 al 30 de julio, sin embargo, los saltarines son conscientes de que podría darse el factor sorpresa.
"Habrá que buscar los boletos, sin embargo, estos eventos suelen ser complicados con las nuevas fi guras", indicó Pacheco.