Lo peor que le podía pasar a James Rodríguez este sábado era no salir en la lista de Real Madrid para disputar la final de la Champions League. Zidane prefirió a Asensio, que marcó un gol, por sobre el colombiano. Un golpe duro para el ex Mónaco, quien costó 80 millones al cuadro merengue luego del Mundial Brasil 2014 en el que consiguió la Bota de Oro.
Todo estaba predestinado. El viernes, Zinedine Zidane dio a conocer a sus 25 convocados para el partido frente a Juventus. James figuró, pero también lo hicieron Bale, Kovacic, Asensio, Morata y Danilo, los suplentes de la final. "Un jugador que ha sido importante en la rotación no estará en el banquillo", antecedía el diario español "Marca" días antes, para explicar la posible ausencia de James en los 18 que salieron al campo.
Si bien no hay nada confirmado, todo hace indicar, mucho más luego de no ser considerado para la final, que James Rodríguez no continuará en el Real Madrid. Se entiende que al '10' suplente de uno de los clubes más grandes del mundo ya haya cansado de las decisiones de Zidane, que, finalmente, parecen haber sido acertadas. Se cansó de las 17 suplencias en 22 partidos jugados en lo que va del año y de solo acumular 1179 minutos, casi la mitad de lo que jugó en la temporada 2014/15; de los reclamos de su afición y los oídos sordos de Zidane.
El 12 de agosto de 2014, James Rodríguez pisó Cardiff para debutar con el Real Madrid y ganar su primer título con el equipo (Supercopa de Europa frente al Sevilla) ante la presencia de casi 40 mil espectadores. Esta vez, volvió al mismo lugar, al parecer, para decirle sigilosamente "adiós" a su club en una final de Champions League.