Lionel Messi sigue derrochando talento en cada partido. Ante Real Madrid no fue la excepción. El artillero del Barcelona abrió el marcador apenas a los tres minutos tras una fantástica jugada individual.
El '10' del Barcelona tomó la pelota por el carril derecho y no la soltó más. Aceleró a toda potencia para dejar descolocados a Casemiro y Luka Modric. Este último se comió un amague del argentino.
Lionel Messi ya tenía visualizado el arco, por ello sacó un potente disparo, el cual terminó impactando en Raphael Varane. Finalmente la pelota se desvió en el francés y entró al arco, pese a los esfuerzos de Keylor Navas, portero titular del Real Madrid.