Se fue solo del vestuario visitante del Hard Rock Stadium. Sin la ropa oficial del club y abstrayéndose de todo lo que le ha rodeado desde que llegó a Estados Unidos con el Barça, aún su club, el pasado día 19. Neymar está listo para acabar su relación con el Barça y las sensaciones que dejó en los últimos días no fueron las mejores.
Fuentes del vestuario azulgrana aseguraron que "ha ido a su bola y eso no le ha gustado a la gente". Andrés Iniesta dijo en conferencia de prensa previa al Clásico de Miami que "debería decir algo". Suárez le apoyó públicamente ("hay que aceptar su decisión"), pero las sensaciones no fueron las mejores. "Hay quien se siente mareado con tanto cambio de opinión", expresan desde dentro de la expedición oficial. "No ayudaron esos vaivenes", insistieron. Con Lionel Messi "no acabaron mal, pero se han ido distanciando con el paso de los días".
Con la directiva, más de lo mismo. "El presidente ha acabado muy cansado con todo lo sucedido", explican con algo de tristeza. "Da la impresión que la relación con los Neymar se deterioró mucho con los directivos del club y que ya no se ve tan mal que deje 222 millones de euros en la caja fuerte del Camp Nou. Sin duda hubiesen preferido evitarse todo este follón, pero habiendo sucedido no se acabó bien de todo".
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