En el verano de 2016 fue Kevin Gameiro la gran apuesta ofensiva del Atlético de Madrid, ya que pagó más de 30 M€ al Sevilla por él. Había firmado un gran curso con el cuadro hispalense y parecía ser ese goleador que necesitaba el equipo de Diego Simeone para acompañar a Antoine Griezmann.
Pero el balance de la campaña no fue el esperado, ya que la terminó con 16 dianas en 46 partidos y la sensación de que su compatriota el ex de la Real Sociedad seguía soportando todo el peso ofensivo del club madrileño. Por eso el combinado colchonero está haciendo todo lo posible para repatriar a Diego Costa.
El internacional español, ya nadie lo esconde, es el gran anhelo de Diego Simeone, pero todavía su fichaje no se concreta. Y aunque lo hiciera no podrá jugar hasta enero, lo que da un cierto margen a Gameiro de cara a esta nueva campaña. Y es que al menos tendrá unos meses por delante para poder demostrar de nuevo su valía.
Fue operado al inicio del verano y le ha costado tener una pretemporada atípica. Hasta ahora su principal aliado ha sido la sanción de la FIFA que ha impedido las llegadas al club del Wanda Metropolitano y ha frenado muchas salidas, ya que si no es probable que hubiera protagonizado bastantes rumores. En cualquier caso, ahora tiene por delante la oportunidad de convencer a su entrenador y volver a ser ese goleador letal que idolatraba el Sánchez Pizjuán.