La federación francesa de fútbol suspendió al árbitro Tony Chapron hasta nuevo aviso este lunes, un día después que tuviera una insólita reacción en el triunfo del PSG como visitante sobre Nantes (el gol lo marcó Angel Di María). El juez del partido le pegó una patada y luego expulsó al defensor brasileño Diego Carlos, del local.
La federación indicó que Chapron será citado por funcionarios de la liga en una audiencia disciplinaria luego del incidente. El árbitro, que estaba designado para impartir justicia este miércoles en el partido entre Angers y Troyes, quedó marginado, pero ya salió a defenderse en los medios. "Fue un gesto torpe e inapropiado. Quiero disculparme con Diego Carlos. Se ha enviado un informe adicional al Comité Disciplinario para que se retirara la tarjeta recibida por el jugador del Nantes, ya que a la vista de las imágenes su gesto fue involuntario", admitió el árbitro.
"En el partido, fui golpeado por Diego Carlos. Por ese golpe, por el shock, sentí un dolor agudo y en un acto reflejo estiré la pierna hacia él. No haré más comentarios", sentenció luego Chapron.
El extraño incidente ocurrió cerca del final del partido. El defensor corría detrás de Chapron cerca del medio campo y al tratar de no quedarse rezagado en la jugada hizo contacto inadvertidamente con los talones del árbitro cuando sus caminos se cruzaron.
Chapron aterrizó sobre el césped y luego, en lo que pareció un descarado acto de represalia, estiró su pierna derecha para impactar sobre el futbolista. Furioso, el árbitro se levantó, cobró tiro libre para el PSG y le mostró la amarilla a Carlos, que ya estaba amonestado.
Nantes-PSG: la incomprensible expulsión de un árbitro que se descontroló
De acuerdo con la federación, Chapron reconoció que el contacto del jugador fue accidental y ofrecerá más detalles en un reporte que deberá presentar ante el comité disciplinario de la liga francesa.
Pero no es la única locura de Chapron como árbitro en un campo de juego. Por la segunda fecha del Grupo F de la Liga de Europa de la temporada 2016-2017, en el partido entre Athletic de Bilbao y Rapid de Viena, en San Mamés, protagonizó una situación ridícula: sobre el cierre de la primera mitad dio como válido un gol del local en clara posición adelantada, pero tras reunirse con sus asistentes prefirió cobrar un penal para el Athletic; y enseguida volvió a revertir su decisión para sancionar el fuera de juego.
También tuvo problemas con Zlatan Ibrahimovic. En un partido en el que el delantero marcó tres goles para el PSG el árbitro se negó a darle el balón al sueco, que -como se acostumbra cada vez que un jugador anota por triplicado- quería llevarse el balón de recuerdo. Chapron adujo luego que no se lo había entregado por las declaraciones que había realizado Ibrahimovic en la semana previa contra el arbitraje francés.
Chapron volvió a estar en el centro de la escena -y envuelto en polémica- cuando le dio el "pésame" al entrenador vasco del PSG Unai Emery luego de la ruidosa eliminación del equipo parisino de la Champions League de la temporada ante Barcelona (había ganado la ida 4-0 y cayó 6-1 en el Camp Nou). Según Chapron, el arbitraje del segundo partido había sido "dudoso y polémico".