La Copa entra en su fase decisiva y Simeone ha aparcado las rotaciones masivas de anteriores eliminatorias. El plan para este miércoles (19:00) incluye a casi todos los titulares, sobre todo en ataque, pero en la portería mantendrá a Moyá. Es la única demarcación donde no ha repartido minutos a lo largo del curso y quiere premiar al balear por su buen trabajo y será titular ante el Sevilla.
La sombra de Oblak, quizá el guardameta más en forma de Europa, es alargada y quitarle el puesto en Liga se antoja prácticamente imposible. Pero Moyá quiere demostrarle al Cholo que puede contar con él. Sus números en esta Copa son muy buenos, aunque también es cierto que el Atleti se ha topado con dos rivales de Segunda B que no le han exigido demasiado. En cuatro partidos, Moyá sólo ha encajado un gol, de Lolo Plá (Elche), de penalti. En esos cuatro partidos ha tenido que realizar siete paradas, aunque algunas de mérito, como un mano a mano ganado a Manu Molina en Lleida o una palomita al disparo de Javi Flores en Elche.
Contra el Sevilla jugó dos veces en la 14-15 y no encajó
Esta está siendo su temporada con menos minutos en el Atlético. En la anterior tuvo su espacio con la lesión de Oblak y jugó 18 partidos (nueve de Liga, ocho de Copa y uno de Champions) en los que se desempeñó con un notable 77,4% de paradas. En la 15-16 disputó seis encuentros, todos ellos en Copa y en la primera, la 14-15, participó en 36 partidos, dos de ellos contra el Sevilla y en ninguno encajó gol. En total, ha defendido la portería rojiblanca en 64 ocasiones.
Así, parece que el mallorquín seguirá siendo el guardameta de la Copa, blindado por una zaga de Champions. Es su ocasión de reivindicarse.
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