El West Brom confirmó que cuatro de sus jugadores estuvieron incoluctrados en el "robo" de un taxi durante el campamento invernal de entrenamiento del equipo en Barcelona.
Se trata de Jonny Evans, Gareth Barry, Jake Livermore y Boax Myhill, quienes ya emitieron un comunicado para disculparse por el penoso hecho.
Los cuatro futbolistas rompieron el toque de queda del equipo y salieron de fiesta en Barcelona. Luego de que un taxi los llevara a un McDonald's en el barrio del Puerto Olímpico y mientras el chofer se encontraba dentro del restaurante, decidieron "tomar prestado" el vehículo para regresar a su hotel.
Al llegar al hotel, los jugadores dejaron el coche abandonado fuera del inmueble y se fueron a dormir. Al ver el auto, la recepcionista de The One llamó a la policía para reportarlo.
La policía acudió al lugar y llevó a los futbolistas a la estación local para interrogarlos. Ninguno fue sometido a pruebas de alcoholemia ya que no los detuvieron al volante y todos fueron liberados unas horas después.
"Reconocemos y nos disculpamos por haber roto el toque de queda, aceptamos que nuestras acciones representan una violación a los estándares de profesionalismo que se requieren de nosotros como representantes del West Bromwich Albion", dijeron los jugadores en el comunicado.
Mientras que la policía de Barcelona investiga el incidente, el West Bromwich abrió una pesquisa interna y se espera que los cuatro reciban una multa de dos semanas de salario.
A pesar del incidente, Evans y Barry fueron nombrados en la alineación titular para el partido entre el West Brom y el Southampton de este sábado en la FA Cup.