El Real Madrid regresó a los entrenamientos tras dos días y medio libres de Zinedine Zidane a sus jugadores, con una sesión vespertina exigente, en la que Militao y Casemiro ganan ritmo para estrenarse el miércoles, ante el Red Bull Salzburgo, partido amistoso en el que podrán reaparecer Courtois y Jovic.
La vuelta al trabajo del Real Madrid dejó una sesión más larga de lo habitual de Zidane a sus jugadores, con la que preparó el próximo amistoso en una semana en la que encara las dos últimas pruebas para mejorar antes del primer partido oficial en LaLiga Santander.
El técnico madridista podrá contar para medirse al Red Bull Salzburgo con el portero belga Thibaut Courtois, ya recuperado totalmente de su esguince de tobillo. Terminó la pasada semana regresando al grupo y en la sesión del lunes confirmó sus buenas sensaciones.
Al igual que el delantero serbio Luka Jovic, también recuperado de un golpe y listo para volver a tener minutos en el Real Madrid, en su proceso de adaptación en pretemporada.
Siguieron un plan especial de entrenamientos durante el fin de semana los brasileños Militao y Casemiro, últimos jugadores en incorporarse al trabajo, junto al colombiano James Rodríguez, tras la disputa de la Copa América. Los dos primeros tendrán minutos el miércoles y el futuro de James está por despejarse en función de los fichajes que lleguen al club blanco.
Se ausentaron de la sesión los lesionados Ferland Mendy, Marco Asensio y Brahim, que fue el único que pudo completar su plan de trabajo en solitario sobre el césped, como informa el club en su web.
El grupo, en el que trabajó con intensidad Gareth Bale a la espera del cierre de mercado en Inglaterra y si encuentra una salida en un club inglés, inició la tarde con carrera continua y un circuito, antes de realizar ejercicios de posesión y presión y terminar con partidos en espacios reducidos.
Fuente: EFE