En la rueda de prensa del pasado martes, en la que persistió en mantener en secreto los nombres de los tricolores que cometieron actos de indisciplina, tras la eliminación en la Copa América 2019, al festejar en la madrugada en el piso 17 del hotel de concentración, Francisco Egas, presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, dijo que iba a ‘zanjar’ el tema de Vinicio Luna.
Aunque hace dos meses se declaró ‘sorprendido’ de la presencia del excoordinador de selecciones en Brasil, al que aseguró no haber visto en el hotel donde se alojaba Ecuador, Juan Martín Ampuero –exjefe de prensa despedido tras ayudar a subir cartones de cerveza al piso 17– refutó la versión de Egas al afirmar que este y Luna mantuvieron reuniones para planificar la logística del traslado y del combinado nacional rumbo a la Copa América.
Además, el 18 de junio anterior EL UNIVERSO publicó que “una fuente de este Diario, que está en Brasil, aseguró que Luna –que tras cumplir su primera condena fue gerente deportivo de Universidad Católica, entre el 2008 y 2010, contratado por Egas– almorzó con la dirigencia de la FEF antes del juego (de debut) con Uruguay” en el torneo continental.
Empezamos a ver que esa relación podía ser tóxica, a pesar de ser una relación exclusiva con el DT (Gómez). Nunca hubo contrato de la FEF o un pago para Luna (foto). Francisco Egas, titular de la Federación
Sobre Luna, condenado en el 2007 por intento de tráfico de migrantes mientras laboraba para la FEF y en el 2016 por lavado de activos en perjuicio de ese organismo, Egas dijo en la rueda de prensa: “Voy a zanjar este tema. Me he quedado muy sorprendido por cómo la prensa ha manejado el caso del piso 17, así como la relación con Vinicio Luna, incluso tomando declaraciones de un excolaborador de la FEF (Ampuero), porque parece que hemos descubierto algo muy oscuro”.
El directivo, que prometió transparencia en la Ecuafútbol al asumir la presidencia el 31 de enero pasado, explicó que “Luna y (Hernán) Bolillo Gómez tenían una amistad y una relación muy estrecha. Luna llevaba la elaboración de planes de trabajo y viajes en lo que correspondía exclusivamente al técnico. Él (Luna) traía todos los informes que le correspondían al Bolillo y por eso lo veían aquí (en la Federación).
Y aunque dijo que tomó la decisión de alejar a Luna de la FEF “antes de que descubran esto que parece tan malo”, su medida la aplicó recién el 17 de junio anterior, al viralizarse una foto de Luna fuera del hotel de la Tricolor en Brasil, donde aparece junto con Pedro Mauricio Muñoz (coordinador) y el entrenador Gómez.
‘¿Qué tiene de malo?’
Egas también se refirió a su antecesor, Carlos Villacís, responsable de la contratación de Gómez cinco meses antes de terminar su periodo en la FEF.
Álex de la Torre, exvicepresidente de la Federación, dijo hace quince días que en las elecciones de enero Egas era el candidato que apoyaba Villacís (el otro aspirante era Selim Doumet). “No me parece que sea algo malo que Villacís haya apoyado nuestra campaña. Acá se quieren pintar como malas cosas que realmente no las son. Seguramente como todo ecuatoriano tuvo su preferencia”.
Seguramente Villacís (foto) quería que sea yo el que esté acá y no la misma gente que le hizo muy difícil gobernar la FEF durante su estadía aquí. Francisco Egas, presidente de Ecuafútbol
Egas denunció que en el directorio de Villacís se gastaban al año hasta $ 2 millones en viáticos y que en quien más se gastaba era en De la Torre. “Egas no dice que Villacís, como presidente de la FEF, recibía de la Conmebol $ 20.000 y aparte cobraba dieta de $ 250 por sesiones del directorio. No dice nada porque Villacís los apoyó para que lleguen a la FEF”, contragolpeó De la Torre. (D)