El Manchester City de Pep Guardiola inició la temporada con un claro objetivo: llevarse el título de la Champions League. Sin embargo, en búsqueda de cumplir esa meta, se encontró con una mala noticia que podría influir seriamente en el rendimiento del equipo: la lesión del defensor Aymeric Laporte que lo mantendrá alejado de los terrenos de juego por un periodo de seis meses.
El propio Guardiola dio a conocer que Aymeric Laporte no podrá jugar por medio año tras someterse a una cirugía en la rodilla para reparar un daño que tenía en el cartílago y los meniscos. El zaguero francés había sufrido una lesión en la victoria por 4-0 del Manchester City contra el Brighton & Hove Albion y el estratega español recién pudo conocer la gravedad de la misma después de la última fecha FIFA.
Por lo tanto, los únicos defensores centrales disponibles para el Manchester City en estos momentos son el argentino Nicolás Otamendi y el inglés John Stones. Con la venta de Vincent Kompany y Eliaquim Mangala en el último libro de pases, ahora Pep Guardiola tendrá que encontrar soluciones para armar una dupla sólida en el fondo.