El delantero Antoine Griezmann acordó en secreto, en marzo de este año, el pago de 14 millones de euros en comisiones por su fichaje al Barcelona, según informó El Mundo. El abogado del francés le envió las propuestas del club azulgrana a través de correos electrónicos.
"Según ha podido acreditar este periódico, su abogado personal, Sevan Karian, le remitió por escrito una propuesta en este sentido, con copia a su padre Allan y a su hermana Maud. En este correo electrónico se fijaron las cantidades y las personas a las que se debía abonar un porcentaje por haberle ayudado a fichar por el Barza, extremo que ya entonces, y a tenor del contenido de las comunicaciones, se daba por cerrado", afirmó el diario español.
El medio informó que en los correos electrónicos se abordaron cuatro grandes lotes de comisiones. El primero fue asignado para su padre y su hermana (quien también es su agente), el segundo fue para el abogado Karian, mientras que el tercero fue para un comisionista francés. El cuarto lote fue para un abogado barcelonés que fue mediador clave en su fichaje. El último monto ascendió a los 7 millones de euros.
"El reparto de los porcentajes acabó provocando una agria disputa entre los integrantes del entorno del futbolista por el reparto del dinero. Estas desavenencias desembocaron, en primer lugar, en que el comisionista francés se acabara quedando completamente fuera de la operación, por decisión de la familia, motivo por el cual decidió vengarse aflorando los correos electrónicos", informó el periódico español.
En aquel entonces, Atlético de Madrid disputaba los octavos de final de la Champions League ante Juventus. "A pesar de que en ese momento el jugador tenía contrato en vigor con el conjunto rojiblanco, cerró su contratación con el Barcelona sin que hubieran mediado los preceptivos contactos previos entre ambos clubes", aseguró el medio.
Es decir, según los documentos a los que accedió el diario español, Antoine Griezmann ocultó a su exclub el acuerdo que había cerrado mientras el 'Atleti' disputaba la temporada. Asimismo, esperó hasta el 1 de julio para que su cláusula de recisión se redujera de 200 millones de euros a 120. Por este motivo, el club rojiblanco reclama los 80 millones por el fichaje del francés. Atlético de Madrid ya ha afirmado que cuenta con la documentación suficiente para solucionar el caso a su favor.