Getafe 3-0 Krasnodar
«Tenemos que ir a por el partido, porque desde que soy técnico nunca he pensado en encarar un encuentro para cosechar un empate. Preparamos siempre los partidos para ganar y mañana no va a ser una excepción». José Bordalás ya había dejado claro en la previa que su equipo no iba a especular con el resultado. Aunque un empate garantizaba su presencia en dieciseisavos de final, el Getafe se tomó el partido como si de una final se tratase, con el ánimo de evitar la agonía que implica jugar sobre el filo hasta el minuto final.
Aunque a nivel de intensidad y garra, esas intenciones se plasmaron sobre el césped desde el pitido inicial, lo cierto es que durante casi todo del primer tiempo, el juego azulón no resultó efectivo. Los madrileños se apoyaron sobre todo en su costado izquierdo, pero el empuje de Marc Cucurella no fue suficiente para que el equipo diese una verdadera sensación de peligro. Afortunadamente, y pese a necesitar de algo más que un empate para pasar de ronda, el Krasnodar se tomó el asunto con cierta calma, lo que facilitó enormemente la labor defensiva de los getafenses.
En realidad, durante el primer acto, más que ocasiones (apenas una clara por equipo), lo que pudo verse fue una sucesión de choques, golpes, discusiones y tanganas. De hecho, con un árbitro algo más riguroso, es posible que alguno de los dos equipos, o seguramente los dos, hubiese alcanzado el tiempo de descanso con un jugador menos.
El Getafe acaba imponiendo su ley
Como cabía esperar, el encuentro cambio de cara tras el paso por vestuarios. Ambos equipos dejaron a un lado las inocuas disputas y se lanzaron de forma decidida en busca de un gol que aclarase la situación. A diferencia de lo ocurrido en la primera parte, el balón circuló con mucha más fluidez de un lado a otro y tanto unos como otros encontraron muchas más facilidades para pisar el área rival.
Aunque el Krasnodar dio la sensación de encontrase más cómodo en este nuevo escenario, fue el Getafe quien acabó imponiendo su ley. En el 76, justo en ese minuto en el que ya comienza a intuirse la presión y el miedo, Leandro Cabrera aprovechó un saque de esquina desde la izquierda para cabecear a gol un balón previamente peinado por Jaime Mata. Por si fuera poco, dos minutos después, Jorge Molina remató la faena al empujar con acierto un buen servicio de Allan Nyom. Los tantos aflojaron el nudo de la corbata al cuadro azulón y dieron pie a un plácido final de partido en el que apenas hubo noticias de su rival y en elque además hubo tiempo para disfrutar de un tercer gol, obra del brasileño Kenedy (84’).
76' | ¡¡¡GOOOOOOOL del @GetafeCF!!! GOL de Cabrera. @GetafeCF 1-0 @fckrasnodar #VamosGeta #EuroGeta pic.twitter.com/2qzfL2UX7u
— Getafe C.F. (@GetafeCF) December 12, 2019
Tras esta tan merecida como excesiva (por el resultado) victoria, el Getafe concluye esta fase como segundo clasificado del Grupo C. Ahora, ya es cuestión de esperar el resultado del sorteo de dieciseisavos para conocer quién será el equipo que volverá a medir la capacidad competitiva de una escuadra que, pese a sus limitaciones, ya ha dejado claro que no está en Europa por casualidad.
APOEL 1-0 Sevilla
Clasificado para dieciseisavos de final desde hace ya varias semanas, el Sevilla cerraba su participación en la fase de grupos con un casi intrascendente partido ante el APOEL. En realidad, el choque tenía apenas un par de alicientes. Por un lado, el de intentar acceder a la siguiente fase con un pleno de victorias (6 de 6) y, por otro, el de ver en acción a futbolistas que, hasta la fecha, han gozado de un menor protagonismo.
Pues bien, aunque jugadores como Sergi Gómez, Sergio Escudero, Bryan Gil, Rony Lopes, Nemanja Gudelj, Chicharito Hernández o Munas Dabbur se toparon con una excelente oportunidad para acumular meritos, lo cierto es que su rendimiento no fue en absoluto brillante. Por eso, no es de extrañar que al término de los 90 minutos, el marcador reflejase un 1-0 favorable a un conjunto chipriota que, tal vez por eso de jugar ante su público, se tomó el choque con mayor interés. Eso sí, para ser justos, habría que reconocer que el partido podría haber acabado con otro marcador si en el 57 el citado Dabbur hubiese sido capaz de superar a Vid Belec desde el punto de penalti. El israelí falló la pena máxima y apenas cuatro minutos más tarde, Vujadin Savic hizo el tanto de la victoria a la salida de un córner.
Lógicamente, este marcador impide a los de Nervión despedir la fase de grupos con su casillero de derrotas a cero. En cualquier caso, obtener el pleno no era más que una mera anécdota, puesto que el trabajo de verdad ya había sido resuelto, y con bastante brillantez, tiempo atrás. Eso sí, de cara lo que resta, seguramente Julen Lopetegui tenga ahora mismo aún más dudas que certezas sobre la valía de esos jugadores a los que ya venía otorgando un rol bastante secundario...