La derrota en el Santiago Bernabéu ante el Real Madrid significó que el Barcelona pierda el primer lugar de La Liga y vuelvan los cuestionamientos sobre el banquillo azulgrana. Estos no han alcanzado solo a Quique Setién, sino han ido, y con más fuerza, sobre Éder Sarabia, su asistente.
Durante el clásico español, Sarabia fue captado mientras se quejaba de manera airada por algunas jugadas puntuales de los futbolistas del Barza, como Antoine Griezmann o Sergio Busquets, hecho que cayó de mala manera sobre la misma plantilla.
“Eder es un chaval que tiene un gran temperamento, que para muchas cosas nos viene fenomenal. Pero tiene que aprender a controlarse. Está en ello, trata de mejorar este tema porque ya hemos tenido situaciones de estas. Cada vez más esporádicas, pero es algo que no nos gusta”, señaló Quique Setién en entrevista con El Periódico.
“No es una excusa. Es un tema que Eder está intentando solucionar. Es un chaval joven, un chaval impulsivo, que tiene muchísima energía, que para muchas cosas es tremendamente positivo. Pero estamos en el banquillo de un club al que representas y el comportamiento tendría que ser intachable. Es verdad que hay un momento aislado en el que te puede pasar cualquier cosa, te vuelves loco y te descerebras, pero esto hay que tratar de controlarlo”, agregó el técnico.
Setién explicó que ha conversado con Sarabia para poder evitar los mismos errores de actitud en los próximos partidos, asumiendo también la responsabilidad del caso.
“Claro que hemos hablado. Él también está preocupado. No nos da igual esta situación. Es un tema que debemos mejorar nosotros. Se está tratando de poner solución. Y él está trabajando para ello. Ya hemos pedido las disculpas que tenemos que pedir. Y sobre todo yo porque, al final, es culpa mía. Yo tengo que controlar estas cosas”, mencionó.