Los futbolistas del Barcelona cumplen con el confinamiento al que se sometió todo el territorio español debido a la propagación del COVID-19. Los que no viajaron a sus países de origen lo realizan en Catalunya, a excepción del danés Martin Braithwaite, que tuvo que trasladarse hasta su casa en Madrid después que el hotel donde se hospedara cerrara como consecuencia del coronavirus.
Desde su hogar, Braithwaite, jugador azulgrana desde el pasado febrero, contó cómo lleva los días del aislamiento social y lo que aguarda cuando el fútbol vuelva a reactivarse.
“Cuando esto acabe será impresionante, estaremos hambrientos por jugar. Tendremos una motivación extra. Será como tener un animal enjaulado y soltarlo”, contó en el canal de YouTube del club.
“Trato de no perder la rutina cada día. Me levanto a las 8, desayuno, empiezo el entrenamiento a las 9.30 y acabo a las 11.30. Después como algo y paso tiempo con mi familia”, explicó sobre su día a día.
Asimismo, el exatacante del Leganés, afirmó que ahora sigue un trabajo personal muy exigente. “Estoy entrenando más ahora. Cuando lo haces individualmente es más fuerte que en grupo”, contó.
Cabe apuntar que Braithwaite no pudo afrontar el partido de ida de octavos de final de la Champions League ante Nápoli, debido a que ya no podía ser registrado para esa instancia.