El presidente del Atlético Mineiro, Sergio Sette Câmara, dijo que el entrenador venezolano Rafael Dudamel fue despedido del club tras apenas diez partidos por "incompetencia técnica" y porque sus métodos disciplinarios parecían más propios del "Ejército".
"La verdad, es la siguiente: Dudamel fue despedido por incompetencia técnica", aseveró este lunes el máximo dirigente del conjunto de Belo Horizonte en una entrevista a radio Itatiaia.
Sette Câmara respondió así a las críticas del exseleccionador de la Vinotinto, quien le acusó de no ser profesional cuando fue anunciado su despido como técnico de la primera plantilla.
"Nunca intercambié una palabra con el presidente (Sette Câmara) desde mi salida del Atlético. El señor Sergio nunca tuvo la fortaleza, la personalidad y el carácter para dar la cara y poder hablar como profesional y como hombre" del "por qué" de "mi salida", indicó Dudamel en declaraciones al portal 'GloboEsporte'.
El presidente del Mineiro explicó, por su parte, que no se reunió con Dudamel porque consideró que era una pérdida de tiempo hablar con alguien que ya no era miembro del club.
También criticó los rígidos métodos del entrenador, motivo por el cual "no consiguió abrazar al elenco", según el presidente.
"Sentí que quería adoptar reglas demasiado rígidas, creando reglas donde no había necesidad", expresó para citar después que impuso a los jugadores una hora para "despertarse" y "tomar café".
"Parecía una cosa del Ejército y eso no es. El jugador ya es profesional. Él tenía que dejar al equipo preparado, implementar un esquema de juego y eso no ocurrió", sentenció Sette Câmara.
Dudamel fue despedido del Atlético de Mineiro a finales de febrero pasado, tras apenas diez partidos y pese a tener un contrato firmado hasta 2021.
Bajo su batuta, el equipo albinegro fue eliminado a las primeras de cambio de la Copa Sudamericana y la Copa de Brasil, lo que forzó su temprano despido.
En marzo, el Atlético Mineiro anunció a su sustituto, el argentino Jorge Sampaoli, quien dirigió la temporada pasada al Santos, con el que acabó subcampeón del Campeonato Brasileño.