Uno de los grandes morbos de la rivalidad entre Barcelona y Real Madrid es el polémico fichaje del portugués Luis Figo al cuadro merengue en 2000 tras dejar el Barza.
Figo, que llegó a Real Madrid en las primeras elecciones ganadas por Florentino Pérez, admitió que un punto clave para dar el paso fue que no se sentía valorado en Barcelona.
"Fue una decisión importante y difícil, porque cambié de una ciudad que me daba mucho y donde estaba bien; pero cuando no sientes que eres reconocido por lo que estas haciendo, si tienes una propuesta de otro club lo piensas", admitió.
"Los grandes clubes del mundo son parecidos, la diferencia principal es la gente que forma la sociedad, porque yo llegué a Madrid con un cambio importante en la presidencia y al inicio no fue fácil. Era todo nuevo para mí, pero la integración fue buena y con la ayuda de todo el mundo me adapté bastante bien", añadió Figo en una comunicación vía Instagram con el italiano Fabio Cannavaro.
Cannavaro ve a Figo como el próximo presidente de UEFA y el portugués, aunque no lo descartó, aseguró que está contento con su actual labor y siendo embajador de la Eurocopa 2020. "De momento estoy bien con el trabajo que estoy haciendo, estoy aprendiendo mucho y en el futuro ya se verá", culminó.