El gran Johan Cruyff marcó un antes y un después en la historia del FC Barcelona, con un legado que sigue vigente hoy en día tanto en el Camp Nou como entre los millones de aficionados de LaLiga en todo el mundo.
Los logros únicos de Cruyff como jugador y entrenador del FC Barcelona lo convirtieron en una de las figuras más influyentes en la historia de LaLiga, gracias a sus ideas revolucionarias sobre el juego y a la fuerza de su personalidad para impulsar ese cambio.
Por increíble que parezca hoy en día, el Barça no había ganado un título de LaLiga en 13 años cuando llegó al Camp Nou como jugador, ya empezada la temporada 1973/74. Los blaugranas habían arrancado el campeonato en un estado de forma pésimo y se encontraban en la zona de descenso. Pero el exatacante del Ajax rápidamente impulsó al equipo, hasta ganar el título de LaLiga con diez puntos de ventaja.
Después de cinco temporadas en Cataluña pasó a la Liga de Fútbol Norteamericana (NASL), primero con Los Angeles Aztecs y luego con los Washington Diplomats, antes de volver a la LaLiga con el Levante. Pero el encanto del Camp Nou siempre fue demasiado fuerte para que Cruyff se resistiera, y volvió como entrenador en 1990. El FC Barcelona se encontraba una vez más en una situación de dificultad, ya que solo había ganado un título de LaLiga en las casi dos décadas que habían transcurrido desde el debut de Cruyff y con el legendario equipo de la Quinta del Buitre del Real Madrid -con jugadores de la talla de Emilio Butragueño, Michel y Hugo Sánchez- habiendo ganado cinco títulos de liga consecutivos.
El neerlandés se puso manos a la obra y rápidamente reconstruyó el equipo, combinando los talentos locales como Pep Guardiola y Guillermo Amor con los españoles Andoni Zubizarreta y Txiki Begiristain e internacionales de la talla de Ronald Koeman, Michael Laudrup y Hristo Stoichkov.
El nuevo equipo se colocó en la cima de la tabla en la segunda semana, y permaneció allí todo el año, terminando diez puntos por delante del segundo clasificado, el Atlético de Madrid, y consiguiendo el título de LaLiga 1990/91.
Las siguientes tres temporadas fueron cada una más emocionante que la anterior, ganando el título en todas ellas. El Real Madrid lideró la clasificación hasta la última jornada de 1991/92 y 1992/93, pero sorprendentemente cayó en ambas ocasiones contra un equipo del Tenerife entrenado por el exdelantero centro de los merengues, Jorge Valdano. El Barça de Cruyff aguantó el tipo cada año hasta ponerse en cabeza al terminar en la línea de meta y así llevarse el título.
Pero el final de la temporada 1993/94 fue quizás el más espectacular de todos. El RC Deportivo solo necesitaba igualar el resultado del Barça contra el Sevilla en su partido en casa contra el Valencia para lograr su primer título de LaLiga, después de haber liderado la clasificación durante meses. Con el FC Barcelona ganando 5-2 contra el Sevilla cuando se acercaba el final, el Deportivo seguía empatado a 0-0, hasta que se le concedió un penalti en el tiempo añadido. El lanzador habitual de penaltis del Depor esa temporada, Bebeto, había fallado unos cuantos antes de ese partido y pidió ser relevado de esa responsabilidad. Con su sustituto, Donato, ya fuera del campo, la carga recayó en el central Miroslav Djukic...y falló, dando al FC Barcelona un cuarto título de LaLiga consecutivo de la manera más sorprendente que se pueda imaginar.
En 1992, el Barça de Cruyff también se ganó el apodo de Dream Team al ganar el tan esperado primer título de la Copa de Europa, con el famoso gol de falta de Koeman en la prórroga que tumbó a la Sampdoria en la final de Wembley y que puso fin a los malos recuerdos de su derrota ante el Steaua de Bucarest en Sevilla seis años antes.
Aquel cuatro en raya fue el más exitoso en la historia del Barça en cuanto a trofeos ganados, pero también el más influyente en cuanto a filosofía y estilo de juego. Las ideas de Cruyff, influidas por el Ajax, se implantaron en la capital catalana, ya que enseñó al equipo un estilo especial de fútbol, el de posesión, e impulsó una verdadera mentalidad ganadora en todo el club.
Tras retirarse como entrenador en 1996, Cruyff se quedó cerca del Camp Nou, y a menudo aconsejó a los directores y entrenadores en las grandes decisiones. Los demás entrenadores del club, ganadores de la Liga de Campeones, Frank Rijkaard, Pep Guardiola y Luis Enrique, tienen un vínculo directo y significativo con el maestro holandés. "Cruyff construyó una catedral aquí", dijo Guardiola. "Solo teníamos que mantenerla".
El fútbol mundial estuvo de luto el 24 de marzo de 2016 cuando Cruyff falleció a la edad de 68 años después de perder la batalla contra el cáncer. Hoy en día su nombre aún es recordado con admiración en el FC Barcelona y en toda LaLiga. (D)