MADRID, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -
La selección española arrancó el Mundial Sub-20 femenino de Costa Rica con un sufrido empate (0-0) contra Brasil en un partido donde las brasileñas, unas de las principales favoritas al título, tuvieron las mejores ocasiones, pero se encontraron con una seria defensa española.
En la primera parte, las brasileñas tuvieron las mejores ocasiones, obligando incluso a intervenir a la portera Adriana Nanclares, que se mostró muy segura ante el peligro que Brasil ponía desde las bandas.
Las españolas fueron de menos a más, y en la segunda parte se sacudieron el dominio carioca, creando mucho peligro con centros que después no terminaron en remates a portería. La más peligrosa la tuvo Clara Pinedo en el descuento, a quien le quedó un balón franco en el área pequeña tras el mal despeje de una central, pero la jugadora del Athletic la envió fuera.
Comienza así el combinado nacional sacando un punto contra el rival más fuerte de su grupo gracias al entramado defensivo, aunque le faltó mordiente arriba a pesar de contar con jugadoras como Salma Paralluelo, nuevo fichaje del FC Barcelona Femení.
España, que sueña con repetir o mejorar lo conseguido en la edición del 2018, cuando fue subcampeóna, no se pone límites en este Mundial, en el que sus siguientes desafíos serán la anfitriona, Costa Rica, y Australia para tratar de superar la fase de grupos.