Reforzar el eje de la medular. Ése es uno de los objetivos que se ha marcado el Atlético de Madrid de cara al curso que viene. Los rojiblancos cuentan con hasta tres jugadores que podrían moverse en la posición de mediocentro, pero dos de ellos ya han sobrepasado claramente la treintena, el portugués Tiago (35 años) y el español Gabi (33), y el tercero, además de también ser ya veterano (30 años) aún se encuentra en proceso de superar una grave lesión que le mantiene en el dique seco desde el pasado mes de septiembre.
Entre los jugadores que podrían ir provocando el relevo generacional en esta parcela vuelve hoy a coger fuerza el nombre de Kevin Kampl. El esloveno, de 26 años, ha experimentado un notable crecimiento desde que regresó al Bayer Leverkusen (en 2015) y se ha erigido en uno de los centrocampistas más completos y solventes de la Bundesliga (suma 43 partidos y 4 tantos en poco menos de dos años) gracias a su atractiva mezcla de capacidad física y talento para manejar el balón.
Lógicamente, la entidad colchonera aprovechará el choque de vuelta de la Champions League ante el citado cuadro germano para seguir espiando de cerca a este jugador que en el partido de ida dejó ya algunos destellos, pero que en realidad no pudo hacer nada para frenar a un cuadro rojiblanco que se mostró muy superior y se alzó con un claro triunfo por 2-4.
Con contrato en vigor hasta el lejano junio de 2020, el fichaje de Kampl pasa por una siempre complicada negociación con un combinado teutón que, tal y como hoy recoge el diario As, confía en obtener unos 11 M€ con la venta del también exfutbolista de Greuther Fürth, VfL Osnabrück, VfR Aalen, RB Salzburgo y Borussia Dortmund.