Después de tres años en el "purgatorio", Parma reinicia su camino en primera división del fútbol italiano como local en el Enio Tardini frente a una Fiorentina que al mando de Raffaele Palladino también pone en marcha una nueva ilusión en el campeonato italiano.
Un primer paso que se anticipa complicado para un Parma que supo brillar en Europa en la década del '90 y a comienzos del 2000 y que aspira a recuperar la gloria del pasado tras haber sido adquirido por la familia Krause, de origen estadounidense y destacada por haber invertido con prudencia y con visión de futuro.
Para el reestreno en la máxima categoría, Parma apostará por el plantel que supo dominar el torneo de la Serie B en la pasada temporada y ascendió con Fabio Pecchia, que será su timonel por tercer año consecutivo.
Fiorentina se anuncia como un rival de fuste para medir las ambiciones de este Parma que cuenta con un equipo joven y deberá adaptarse a la categoría, por lo cual será necesario tener paciencia para que también lo hagan el mediocampista Adrian Bernabé, formado en Espanyol y en Barcelona con pasado en Manchester City y flamante campeón olímpico con su selección en París.
En él y en los delanteros de la selección rumana Denis Man y Valentin Mihaila, así como en el también juvenil franco-marfileño Ange-Yoan Bonny y en Matteo Cancellieri, que llevó a préstamo de Lazio buscando hacerse un lugar en el equipo titular.
Para el debut faltará el capitán Enrico Delprato en un equipo con "muchísimos jóvenes y con mayoría de jugadores que no tienen experiencia en Serie A", explica Pecchia, quien asegura que no pretende poner excusas por esa situación, sino sacar provecho de la frescura que aportará esa juventud.
"Estamos listos y entusiasmados. No vemos la hora de jugar por los puntos", parece responderle Palladino, arribado a Fiorentina tras dos buenas campañas con Monza en primera división para reemplazar a Vincenzo Italiano.
Luego de tres años de gestión del hoy entrenador del Bologna, Palladino tratará de darle su impronta a su Fiorentina que presentará algunas caras nuevas en el plantel, entre ellas el islandés Albert Gudmundsson, quien llegó procedente del Genoa.
"Soñé con su arribo durante todas estas noches. Es uno de los mejores delanteros de la categoría", aseguró Palladino al considerar que el atacante "será de gran ayuda y vital para la idea de juego que pretendemos darle al equipo".
Gudmundsson no será de la partida mañana porque será presentado el martes en Viola Park, así como tampoco fue convocado el argentino Nicolás González, flamante campeón de la Copa América que estaría a punto de emigrar a Juventus.
Pese a que todo parece indicar que ese será el próximo destino del delantero, González eligió la casaca número 10 de Fiorentina para esta temporada que no lo tendrá en el estreno, así como tampoco tendrá al arquero Oliver Christensen, otro que se alejaría del club, mientras que el zaguero Luca Ranieri no será de la partida porque debe purgar una sanción.
Entre las caras nuevas de Fiorentina se destaca la del arquero David De Gea, que llegó procedente del Manchester United y se anuncia como suplente mañana, el ex Juventus Moise Kean, el mediocampista marroquí Amir Richardson, el volante Andrea Colpani y el zaguero crota Marin Pongracic.
"trabajamos mucho y esperamos iniciar el torneo con el pie derecho. Los nuevos se integraron bien y el grupo está a disposición", explicó Palladino, quien anticipó que Fiorentina jugará con otro sistema porque -dijo- "cada entrenador tiene su idea de juego" y consideró que por eso "quizás se necesite algo de tiempo para que el equipo se adapte".
"Todavía no estamos al 100 por ciento y enfrentaremos a un rival sólido, que se conoce bien por lo que preveo que será un partido difícil", advirtió el DT de una Fiorentina que contará con el aliento de unos 3 mil aficionados en el Tardini.
"Debemos aprovechar esa energía", destacó Palladino, que deberá esperar al menos una semana para contar con Gudmundsson, quien en sus primeras declaraciones como jugador de Fiorentina comentó: "Estoy muy contento de jugar en este club".
Fiorentina, que mañana contará con el argentino Lucas Martínez Quarta en el once inicial, junto al brasileño Dodó, y con sus compatriotas Gino Infantino y Lucas Beltrán como suplentes, perdió las últimas dos finales en la Conference League (frente al West Ham y Olympiakos) e iniciará la ronda preliminar de ese torneo frente al húngaro Puskas Akademia, al que recibirá el 22 de agosto y visitará siete días más tarde por el pasaje a la fase de grupos.
Pero el foco hoy está puesto en Parma, un rival que también aspira a dar un paso en firme en su regreso a la máxima categoría del fútbol italiano con el argentino Nahuel Estévez como titular (su compatriota y arquero Leandro Chichizola se anuncia como suplente), en uno de los cuatro duelos que pondrán en marcha mañana la primera fecha del campeonato.
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