Hablar de jugadores formados en Pumas, que destacaron en Europa, es hacerlo de Hugo Sánchez como mayor referencia; la estirpe del delantero que brilló en el Real Madrid a mediados de los ochentas y principios de la década posterior, dejó en claro su calidad, pero también la institución que lo formó: “Universidad siempre será mi casa; llevo sus colores por siempre”, llegó a decir cuando jugador y en la plenitud de una carrera que le brindó innumerables distinciones individuales.
Detrás de Hugo, con menos reflectores pero mismas ganas por probar suerte en el Viejo Continente, Luis Flores y Manuel Negrete intentaron en España y Portugal, pero más allá de chispazos, nunca se consolidaron ni mostraron argumentos suficientes, siquiera, para que les renovaran los contratos; después llegó Luis García Postigo, artillero letal en el área de definición, pero que ni en el Atlético de Madrid ni en la Real Sociedad logró consolidarse a la par de lo que hizo en Pumas.
A principios del año dos mil, Gerardo Torrado, aún si ser referencia en Pumas, tomó la maleta y exploró por diferentes categorías del futbol español, pasando por las filas de clubes tan desconocidos como el Polideportivo Ejido, hasta recalar en el Sevilla o el Racing de Santander; el contención no se conformó y aguantó más de un lustro moviéndose de un sitio a otro, experimentando y demostrando su calidad, se quedara o no en las plantillas que integraba.
De manera más reciente, una camada llena de características talentosas trajo para Pumas a tres elementos vitales, incluso, para la selección mexicana que acudió a Sudáfrica 2010. Efraín Juárez, Pablo Barrera y Héctor Moreno emigraron a Europa y aunque solo el último en mención se consagró a nivel suficiente para hasta ahora mantenerse por allá, los tres dejaron esbozos de su calidad; de hecho, el propio Barrera milita actualmente, en la etapa final de su carrera, en Universidad Nacional.
Muy distinto a los anteriores, sobre todo en la forma de partir al Viejo Continente, tanto David Izazola como Santiago Palacios, emigraron luego de que en Pumas no encontraran la continuidad suficiente para consolidar sus carreras: el primero lo hizo en Hungría, donde solo estuvo por seis meses, para luego recalar en el Pedregal y el segundo en diferentes divisiones de Holanda, para también regresar a CU, donde al parecer saldrá para este verano, una vez más.
Ahora, es turno de Eduardo Herrera, que en las próximas horas firmará su vinculación con el Rangers de Escocia, equipo histórico que ha comenzado de cero en el máximo circuito desde hace un par de temporadas; el delantero se uniráal también mexicano Carlos Peña y ambos serán dirigidos por un viejo conocido: Pedro Caixinha. Con esto, Herrera se convierte en el futbolista número once surgido de Pumas, y del que se tenga registro, en militar en Europa, desde tiempos de Hugo Sánchez.
LOS ‘EUROPEOS’ FORMADOS EN PUMAS
Hugo Sánchez
Luis Flores
Manuel Negrete
Luis García Postigo
Gerardo Torrado
Héctor Moreno
Pablo Barrera
Efraín Juárez
David Izazola
Santiago Palacios
Eduardo Herrera