Desde temprana hora en el Régimen de Transferencias de la Liga MX, se observó a Carlos Hugo López Chargoy entrar y salir del hotel, donde estaban reunidos los dirigentes del máximo circuito. Transcurrió el tiempo y el Puebla no realizaba ningún movimiento, por lo que se entendía que la deuda de sus dueños no había liquidada.
Hasta casi entrada la media noche, el conjunto camotero publicó en sus redes sociales que “estaban listos” para fichar jugadores. De inmediato empezaron a caer las primeras altas, encabezadas por Moisés Muñoz, ex portero de Jaguares de Chiapas.
A ‘Moy’ le siguieron Erik Pimentel y José Daniel Guerrero, jugadores procedentes del América; asimismo Jonás Aguirre, Alonso Zamora, Franco Arizala y Alonso Escoboza se convirtieron en nuevos jugadores del equipo, además de las renovaciones de Fabían Villaseñor y David Toledo.