Habría que regresar más de 10 años en el tiempo, para comprender la tranquilidad que brindaba el proceso de Ricardo La Volpe en la selección nacional... El 8 de junio del 2005, el Tri se imponía por 2-0 en el estadio Tecnológico de Monterrey, ante Trinidad y Tobago. El triunfo le brindaba al equipo del argentino 13 puntos y la calma suficiente para encarar el resto, la mitad del camino, con la mesura que brinda el trabajo bien hecho. Con este triunfo encaraba la Copa Confederaciones en Alemania.
Los buenos resultados solo contrastaban con la personalidad del entrenador y los comentarios subidos de tono que emitía a la prensa, siempre con esa actitud sobrada ya habitual: "La Eliminatoria la pasamos caminando; nadie le da mérito a ese trabajo ni a los muchachos", llegó a decir La Volpe. Sus números eran fríos y contundentes, tenía el apoyo de la mayoría del público, que resaltaban los resultados y sobre todo las formas positivas con las que jugaba su equipo.
23 PARTIDOS suma el timonel colombiano dentro de su gestión, que inició en noviembre del 2015; hasta ahora, registra 18 triunfos.
Los siguientes dos Hexagonales Finales serían un dibujo contrario a lo que el proceso de La Volpe había logrado, pues en la misma instancia, Sven Goran Eriksson había sido cesado al término del tercer enfrentamiento, por lo que los dos siguientes duelos, Javier Aguirre se hizo cargo de la selección nacional, consiguiendo mejores resultados, enfilando al equipo a la Copa del Mundo.
Al corte de caja de la mitad de camino, México sumaba 6 puntos. Para el siguiente proceso, José Manuel de la Torre padecía una seguidilla de empates que acrecentaban las dudas sobre su capacidad al frente del Tri; en sus primeros cinco juegos con el equipo, registraba un triunfo y cuatro empates, un encuentro después, frente a Honduras y en el Azteca, Chepo sería cesado, debido al llamado Aztecazo (1-2 en el marcador), pero a la mitad del camino, su selección sumaba siete unidades, insuficientes para la tranquilidad de la afición.
Son por estos dos antecedentes y por lo que se vivió con La Volpe, que es doblemente valioso lo que ha realizado Juan Carlos Osorio con la selección nacional, que además de seguir con paso invicto hasta ahora (4-1-0), poco a poco su escuadrón ha mostrado mejores argumentos, como este jueves, cuando México fue de menos a más y terminó goleando a Honduras, la misma selección que dejó fuera a José Manuel de la Torre, años atrás; el timonel colombiano ha equiparado las valiosas y tan vociferadas estadísticas que consiguió antes su similar argentino.
2 DERROTAS completa Juan Carlos Osorio en el total de su proceso al frente de la selección; sucumbió ante Chile (Copa América) y Croacia (Amistoso).
El único renglón en el que La Volpe supera a Osorio es en cuanto a los goles que ha marcado México, pues la selección que se enfilaba a Alemania, hasta entonces, había marcado nueve anotaciones y recibido tres, mientras que el combinado actual completa ocho tantos a favor y mejoró las cifras defensivas, pues apenas ha recibido un tanto en sus primeros cinco compromisos. La empresa es más complicada de lo que parece, porque Juan Carlos y sus pupilos deberán ganar este domingo, frente a Estados Unidos, para seguir de cerca al Bigotón. Han sido dos procesos diametralmente diferentes.
A La Volpe le persiguió su discurso, la eterna rivalidad con Hugo Sánchez, por entonces técnico de moda en México y las formas, esas que al final de su etapa le condenaron. Osorio es todo lo opuesto al argentino, desde su forma de interpretar el juego, hasta en la que se comporta con aficionados y medios. El colombiano, siempre serio, dirigiéndose de usted a cualquiera que le busque algún comentario.
DE DOS ESTILOS
Las diferencias pueden identificarse casi de inmediato. La Volpe y Osorio son dos estrategas que han labrado su camino en la selección nacional de manera exitosa, pero sin duda, lo han hecho a sus formas. Hablar del argentino al frente de México es hacerlo de las corbatas de dragón, del Feng Shui, de las prácticas de mentalización a las que llevaba a sus dirigidos; por parte de Juan Carlos Osorio, además de su seriedad habitual, tiene detalles que repite continuamente, como el usar las plumas azul y roja, la situación de la libreta y hasta el cómo percibe el juego (en cuclillas).
EL DATO
Los siguientes dos duelos de la selección se disputarán en el estadio Azteca (EU y Panamá), escenario en donde México podría conseguir su boleto mundialista.