La Copa Confederaciones era la oportunidad perfecta de varios jugadores para mostrarse. Dicen que es un trampolín internacional, que los que brillan pueden tener buenas opciones para cambiar de club, pero en el caso de México se ve lejano que algunos puedan pensar en eso.
Es más, muchos pudieran haber perdido cierto prestigio, como Oswaldo Alanís, Carlos Salcedo, Néstor Araujo, Héctor Herrera, Raúl Jiménez o Giovani dos Santos.
Y es que en los cuatro duelos que ha jugado el Tricolor en el torneo, no se vieron bien. Carlos Salcedo fue baja por lesión, pero en el primer duelo contra Portugal tuvo una mala actuación.
Muchos señalan que jugar como lateral derecho lo perjudicó. Aunque alineó en dicha posición en la Fiorentina, sus mejores atributos no destacan en el costado.
Es un gran marcador, eso sí, como central ha mostrado sus dotes. Para su mala fortuna, se lesionó y no podrá ver actividad en los próximos tres meses.
Lo positivo es que el ex de Chivas ya había amarrado un buen contrato con el Eintracht Frankfurt de Alemania, por cómo se había desempeñado en el pasado y la calidad que ha destilado. Así que en su caso, el impacto puede ser mucho menor.
Algo similar pasó con Alanís, quien fue utilizado como lateral izquierdo y evidenció las carencias que tiene por la banda. En el duelo contra Alemania, no hizo buena marca y fue sorprendido en varias ocasiones.
Se ve difícil que este elemento pudiera colar a algún club del viejo continente; tendrá que esperar otro torneo internacional para lucir.
En Chivas sigue siendo de los elementos de mayor valor, de los titulares, y, ahí sí, no lo moverán, pese a lo sucedido en esta Confederaciones.
Por otro lado, Néstor Araujo, quien sí jugó en su posición natural, se notó en un nivel bajo que no se le había visto antes. Porque en la era de Juan Carlos Osorio, cada vez que se le ha requerido, respondía con buenas actuaciones. En este torneo no fue así. Tuvo errores puntuales, igual que el resto de la defensa, que fue un punto endeble de este conjunto.
Araujo es uno de los elementos predilectos del colombiano. Estaba lesionado de la mano derecha, y aun así, se le incluyó en la lista, a la espera de que no le perjudicara a la hora de jugar. Eso sí, se le cuidó en los partidos de eliminatoria ante Honduras y Estados Unidos para que pudiera estar al cien por ciento en la Copa Confederaciones.
Héctor Herrera es otro de los elementos que no brilló, que por ahí tuvo un par de acciones importantes, de recuperación, pero al no ser un contención nato y jugar en ese punto, se exhibió en varias ocasiones.
De por sí no estaba en su mejor momento con el Porto, en donde con el paso del tiempo ha perdido protagonismo, y ahora, los malos pasos con el Tricolor pueden hacer que se vea mucho peor.
Cuando Héctor llegó a Portugal, se esperaba que de ahí saltara a un equipo mucho más importante, sin demeritar el prestigio del Porto. Pero se sabe bien que es un equipo que suele observar jugadores jóvenes con futuro para luego venderlos.
Giovani dos Santos, otro de los damnificados, apareció como interior, cuando el mismo Osorio dijo en varias ocasiones que lo veía como media punta. No lució, le faltó agresividad, tomar más el esférico y ser preciso. Se metía constantemente al centro del campo sin el éxito deseado.
Así que el nivel que muestra Gio en la MLS con el Galaxy de Los Ángeles dista mucho de lo que se le vio en la Copa Confederaciones.
Raúl Jiménez, centro delantero, es otro de los que no participó en la posición en la que habitualmente se le ve sobre la cancha. Tenía que sacrificarse más y en varias escenas se le vio fallar a la hora de tomar el esférico. Una de sus virtudes es el disparo de larga distancia, algo que seguramente buscó Osorio al dejarlo todo el duelo contra Alemania, en el que no tuvo una actuación destacada.
Estos elementos han tenido sus buenos tiempos con el Tricolor, pero la realidad es que todos los partidos terminan en lo mismo, en jugar bien, pero no hacen el gol. Ahora, el extra es que varios no fueron colocados en su posición natural y eso les puede costar en cuanto a prestigio, ya que no se vieron bien.