La jornada 17 del Clausura 2018 tendrá una de las mayores coincidencias que se recordarán en la historia del futbol mexicano. Pachuca, cuna del balompié nacional, donde todo empezó, también verá cómo termina la carrera más existosa de un futbolista mexicano.
Rafael Márquez Álvarez debutó y se despedirá de la Primera División con la camisa de Atlas. En aquel lejano 1996, un joven de 17 años fue partícipe de un empate ante Pumas; ahora, un veterano experimentado enfrentará a Pachuca más de 600 partidos después.
El zamorano fue el ejemplo de una mejora gradual, aunque alcanzó el punto más alto de su carrera en el 2009 con el Barcelona. Antes de ello, supo dar sus primeros pasos en el viejo continente con el AS Mónaco, donde obtuvo sus primeros títulos de liga. La consolidación fue evidente y por ello no desentonó dentro de uno de los mejores equipos en la historia del futbol.
Rafael registró 12 títulos con el Barça, seis de ellos en un mismo año para sentar un precedente en la historia del futbol. Las dos Champions League que consiguió con los blaugranas terminaron por destacarlo como el futbolista más exitoso de México, incluso por encima de un pentapichichi.
Márquez también sabía hacer goles. Su técnica depurada y su cabezazo certero lo llevaron a ser una amenaza en tiros libres y saques de esquina. Además, tenía la jerarquía para ejecutar las faltas a pesar de compartir vestidor con un brasileño ganador del Balón de Oro.
El mexicano se despidió por la puerta grande del Barcelona. Una despedida digna de una figura importante, quien además se marchó con halagos por doquier. Entonces fue tiempo de llegar a la Gran Manzana; el New York Red Bulls se hizo con los servicios del 'Káiser' durante dos años, donde disputó 50 partidos y anotó un gol.
Fue tiempo de volver a México. Rafa regresó para liderar un proyecto que terminó siendo sumamente exitoso. Ayudó a que León se convirtiera en el segundo bicampeón de los torneos cortos, rodeado de una camada de jugadores nacionales que también llegaron a ser considerados para la selección mexicana. A pesar del éxito previo, Márquez consiguió algo que aún no tenía: un título en la liga de su país.
El de Zamora puso a prueba su físico y volvió a demostrar su mentalidad competitiva al fichar por el Hellas Verona. Volvió al futbol europeo para jugar una temporada más, esta vez en Italia, aunque se vio limitado por las lesiones, esta vez más evidentes. En una liga dominada por un par de equipos, Márquez pudo competir mientras el cuerpo se lo permitió.
En su última etapa, el hijo pródigo regresó por fin al lugar que lo vio nacer. Atlas recibió a su eterno capitán con los brazos abiertos, en lo que era un final anunciado, a pesar de que el michoacano seguía con hambre de triunfo.
Los colores rojinegros lo vestirán por última vez en el máximo circuito y la Bella Airosa será su última atmósfera. Por lo menos en la Primera División, su era como futbolista ha llegado a su fin. Lo siguiente para Márquez Álvarez será prepararse para su quinto Mundial en junio. La leyenda de Márquez comienza esta noche.
Atlas:
137 partidos
7 goles
1 subcampeonato (1999)
AS Mónaco:
102 partidos
5 goles
3 campeonatos (Ligue 1, Supercopa de Francia, Copa de la Liga)
FC Barcelona:
240 partidos
12 goles
12 campeonatos (La Liga [4], Supercopa de España [3], Copa del Rey, Champions League [2], Supercopa de Europa, Mundial de Clubes)
New York Red Bulls:
50 partidos
1 gol
León:
72 partidos
1 gol
1 bicampeonato (Apertura 2013, Clausura 2014)
Hellas Verona:
22 partidos
SRN