Ya lo hemos dicho hasta el cansancio: Juan Carlos Osorio maneja a la Selección mexicana como un cubo de rubik. El director técnico colombiano es capaz de cambiar la cara del equipo con un simple movimiento, adaptándolo a las exigencias del partido en un momento determinado. Esto hace del Tri un equipo indescifrable para los rivales.
A lo largo de su ciclo, Osorio ha probado una serie de disposiciones tácticas que le permiten a México estar preparado para cualquier escenario. Y en ese aspecto, Miguel Layún es uno de los elementos más valiosos del combinado azteca, pues tiene la habilidad para adaptarse a cualquier rol dentro de la cancha y modificar la estructura del Tri.
QUÉ LE CONVIENE A MÉXICO DEL ALEMANIA VS COREA
El lateral del Sevilla dio una extraordinaria exhibición de polivalencia en la victoria ante Corea del Sur, por la segunda fecha del Grupo F. Igual que contra Alemania, Miguel Arturo inició como volante por derecha y no solo ofreció alternativas en ataque al combinarse constantemente con Carlos Vela, sino que también realizó una presión efectiva sobre Kim Min-Woo.
Las cosas no le pudieron salir mejor a Osorio, pues el equipo ganaba con comodidad por 2-0. Sin embargo, el ingreso de Lee Seung-Woo cambió por completo el partido desde el punto de vista táctico y el estratega colombiano reaccionó inmediatamente mandando a la cancha a Rafa Márquez y dándole una indicación especial a Layún, clave en el cierre del partido.
Debido a la necesidad que tenía de buscar el partido, Corea del Sur tuvo mayor protagonismo con la pelota y eso hizo retroceder al Tri. En esa fase del juego, el veracruzano dejó de jugar como volante y se posicionó como lateral derecho, permitiendo que Edson Álvarez pasara a jugar de central y así formar una línea de cinco defensores en el fondo.
Con el nuevo rol de Layún, la victoria de la Selección mexicana nunca estuvo en riesgo en el Rostov Arena. Ni siquiera el golazo de Son Heung-Min pudo evitar que el Tri se quedara con los tres puntos. Todo esto fue, en buena medida, por culpa de Layún.