Vans Royal Side Stripe llegó a la Ciudad de México por quinta ocasión con un evento renovado, ya que ahora incluyó una categoría femenil en la que participaron las 16 mejores patinadoras del ranking de la Federación Mexicana de Patines sobre Ruedas (FEMEPAR), y 55 hombres que se enfrentaron en la semifinal, misma que arrojó a los 10 finalistas de la tarde.
Para poder estar en la competencia, se realizaron eliminatorias en cuatro estados de la República: Guadalajara, Monterrey, Estado de México y la CdMx.
Berenice Martínez, originaria de Monterrey, Nuevo Léon, se posicionó en el primer lugar y se convirtió en la primera campeona en la historia del torneo. Ella lleva seis años patinando, y agradece que se realicen este tipo de competencias y que tomen en cuenta a las mujeres: “Esto ha crecido mucho, porque antes todos los concursos eran para hombres. Esta es la primera vez que hay una categoría para nosotras en el Royal Side Stripe y me siento muy contenta de haber quedado en el primer lugar. Para lograrlo, practiqué diario”.
Itzel Granados se colocó en el segundo lugar y Vizuet Lugo en el tercero.
En la categoría varonil, Nelson Garza se llevó el trofeo de la primera posición: “Yo vine a dar el resultado mientras patiné y me divertí en la pista y eso es lo más importante, no sólo para un patinador, sino para cualquier deportista” declaró en una conferencia de prensa posterior a la justa que se celebró en el Gimnasio Olímpico Juan de la Barrera.
Sammy Mijangos se llevó el segundo premio, y Alexei Navarro consiguió el tercer lugar, pero repitió premio pues los jueces denominaron que él realizó el mejor truco en toda la competencia, un Backside 50-50 270 out en el wall ride.
Antes de las finales, los patinadores estadounidenses del equipo global de Vans Tony Trujillo, Chris Russell, Pedro Delfino y Roman Pabich llegaron a la pista para dar una exhibición y fomentar el deporte, acompañados de los atletas locales Max Barrera y Luca Barrena.
Además, el hijo del fundador de la marca, Steve Van Doren, asistió a la función para convivir con los fanáticos mexicanos en una parrillada que realizó afuera del recinto, en la que regaló gorras y autógrafos:
“Mi papá, Paul Van Doren, empezó la marca en el año de 1966. Hacíamos zapatos en los Estados Unidos, y muchas de las personas que trabajaban con nosotros, eran mexicanas. Hicieron todo muy bien y nos ayudaron a que la marca creciera. Estoy muy emocionado de estar aquí otra vez. Además, las chicas estuvieron grandiosas, y la gente aquí siempre es muy amable”.
Todos los competidores sumaron puntos en el ranking de la Federación, pues esta competencia formó parte del serial clasificatorio de los Juegos Panamericanos de Perú 2019.