Guillermo Álvarez se siente fuerte en torno a su futuro en el club Cruz Azul, y aseguró que más allá del conflicto legal que tiene con Víctor Garcés, en donde no queda claro si el abogado es vicepresidente del equipo, la palabra que impera al final, en torno al equipo, es la suya, y el resto de los temas simplemente se arreglará en tribunales.
“Solo puedo opinar que es una resolución de la autoridad y de manera interna se deben arreglar las cosas, en este momento no tiene reconocimiento, no es que haya confrontación, pero se llevó todo a carácter mediático y hubo confusión y especulaciones de todo tipo. El presidente soy yo, y soy quien toma más decisiones”, señaló el dirigente
Sobre el futuro del equipo, aseguró que la temporada se planteará con Robert Dante Siboldi como estratega, ya que “tiene un contrato hasta mayo de 2020”, y por lo tanto se escuchará la voz del técnico para el armado del equipo y posibles refuerzos.
“Se tiene que valorar con el cuerpo técnico, no es opinión solo de una persona, hay herramientas para hacer esas evaluaciones, de acuerdo a la etapa, para nosotros lo triste es que han sido ocho empates, otro rival de la capital tiene siete, pero con dos triunfos importantes alcanzó zona de clasificación”, comentó, además de asegurar que se siguen analizando las distintas posibilidades de estadio para La Máquina.
“Si conoce otro terreno hágalo saber, van como 12 que nos dicen, mientras no se tenga la certeza de un terreno que pueda adquirir la institución, es prioritaria la industria, estamos haciendo inversiones que muy pocas empresas en este país, se han generado empleos en Hidalgo y Oaxaca, no podemos dejar de lado el club de futbol, tenemos contrato en el azteca, la respuesta es la misma, el contrato es por dos años más y estamos contentos, no perdemos la ilusión de un estadio propio”, dijo.